CHOELE CHOEL (AVM).- A los ya habituales problemas de las ambulancias ante cada intervención que deben hacer, ahora se suma un nuevo problema en el hospital cabecera de Choele Choel. Se trata de la renuncia del médico Héctor Mondragón, quien trabajaba en el sector de Neonatología, área que quedó con un sólo especialista.

El auxilio por accidentes que ocurren en las dos rutas que cruzan el Valle Medio sigue siendo una odisea, por el estado calamitoso en que se encuentran dos de las tres unidades que tiene el hospital.

Se trata de las dos Renault Trafic que son las que habitualmente se utilizan para asistir a los accidentados dentro de un radio cercano a la comarca. Sus motores ya piden a gritos una reparación.

La otra se utiliza únicamente para derivaciones, generalmente al Alto Valle u otras regiones.

Hace unas semanas, en una de las ambulancias debieron realizar una asistencia con accidentados a 50 kilómetros de esta localidad por la Ruta nacional 22 en dirección a Río Colorado.

Tanto el viaje de ida como el de vuelta resultaron ser desgastantes para el chofer y el personal ,dado que no sabían si podrían llegar a destino, más aún la vuelta con los heridos sobre la ambulancia.

Ese mismo día, un hombre que iba camino a su casa sufrió un paro cardíaco en la vía pública que le ocasionó la muerte. Hasta el lugar tuvo que ir la camioneta de Criminalística junto al médico y el enfermero. Si bien tardaron un tiempo prudencial desde el hospital hasta el lugar, llamó la atención en el vehículo en que lo hicieron.

Hace ocho días un nuevo accidente ocurrió en la Ruta 22, a casi 60 kilómetros de esta localidad. Nuevamente se repitió el calvario de salir con la incertidumbre de no saber si se podría llegar por el estado de los vehículos.

Por si fuera poco, las ambulancias deben andar a muy baja velocidad.

Si bien no lo ha expresado públicamente, el personal responsable de las ambulancias hace tiempo que puso al tanto de la situación a doctora Luisa Lamalfa -directora del hospital- pero hasta el momento no tuvieron respuesta alguna.

"Nosotros queremos que esto se solucione, son camionetas que andan porque tratamos de mantenerlas a fuerza de voluntad, pero necesitan urgente una reparación. La gente nos ve andar y nos pregunta qué pasa que andamos a 40", dijo uno de los choferes.

"Río Negro" intentó hablar con la directora del hospital, pero no se encuentra en la localidad.

Un médico menos

Tan sorpresiva fue la renuncia del médico Héctor Mondragón, que aún dentro del hospital no salen del asombro.

Para colmo las dos parteras del nosocomio se encuentran de licencia por razones de salud. Con la renuncia del profesional el sector el área de Neonatología quedó prácticamente desprotegida o con la responsabilidad en una sola persona.

Si bien no fue confirmado oficialmente, la renuncia del médico se debió exclusivamente a una visión muy distinta de la que tiene la dirección del hospital en cuanto al manejo del mismo.

Hace unos meses, un médico cirujano también presentó su renuncia y si bien los términos de su dimisión no fueron los mismos, hay cierta similitud con la actual.