| Domingo 01 de Febrero de 2009 | Edicion impresa pag. 45 > Deportes |
Ambos empezaron el 2009 como terminaron el 2008. Boca festejando un título y River sin poder encontrar un rumbo futbolístico más allá del cambio de entrenador.
Hoy en Mendoza volverán a verse las casar en la Copa Revancha, que marcará el final de la era veraniega para los dos equipos más populares del país.
El partido se disputará en el Malvinas Argentinas de Mendoza desde las 21:10.
El actual campeón del fútbol argentino y reciente vencedor del Pentagonal de Grandes, tendrá algunas novedades.
La principal será el regreso del "Pato" Roberto Abbondanzieri, el arquero más ganador de los últimos tiempos en Boca.
Según las palabras del técnico Carlos Ischia, también es muy probable que el delantero Rodrigo Palacio tenga algunos minutos en cancha. Una buena noticia.
El que no estará es Juan Román Riquelme, quien se quedó en Buenos Aires, recuperándose de una lesión.
La partida de Jesús Dátolo le abrió la puerta a varios para quedarse con ese puesto, aunque el que tendrá la primera chance de jugar como volante por izquierda será Nicolás Gaitán.
El cuerpo técnico de Boca privilegió la puesta a punto final para el inicio del Clausura y la recuperación de los jugadores lesionados en el último tramo de la pretemporada. Por eso en Mendoza presentará mayoría de suplentes.
En River las necesidades son mayores porque no logra dejar atrás la ausencia de buen juego y encima no logra resultados que disimulen el mal momento del equipo.
"Pipo" Gorosito no está conforme con el rendimiento del equipo y además se le está empezando a agotar la paciencia por la no llegada de los refuerzos que solicitó. Lo de Cristian Fabbiani parece ya una utopía y las gestiones por el volante de Argentinos Juan Mercier no avanzan mucho.
A ello se suma el pedido del técnico por un lateral por izquierda.
En el medio son cada vez más fuertes los rumores de alejamiento de Leonardo Ponzio (se iría al Zaragoza).
Con ese panorama, el equipo de Núñez tratará de sacar a relucir su amor propio para empezar a enderezar el rumbo, que vien torcido desde hace varios meses.