LA PAZ (DPA).- El presidente de Bolivia Evo Morales reemplazó al titular de la petrolera estatal YPFB, Santos Ramírez, para que se defienda de acusaciones sobre presunta corrupción.
Morales designó en el cargo al ministro de Planificación del Desarrollo, Carlos Villegas, quien juró en forma interina tras una reunión de gabinete, calificada de emergencia.
Involucrado por denuncias anónimas que la prensa local destacó en los últimos días, Santos Ramírez negó las acusaciones sobre una supuesta estafa a la petrolera estatal y sus presuntas vinculaciones con un grupo receptor de sobornos de la compañía boliviano-argentina Catler-Uniservice.
Según el fiscal Marcos Vidal, asignado al caso, se investiga un supuesto pago de 450.000 dólares que los ejecutivos de esa empresa se aprestaban a efectuar el pasado martes en La Paz cuando fueron asaltados por una banda de sicarios que mató al gerente de Catler Service, Jorge O´Connor.
"Sabemos de dónde vienen y adónde van" las denuncias, advirtió el presidente Morales al tomar el juramento a Villegas, quien encabeza la intervención de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) para "transparentar" el caso.
La empresa petrolera ejecutará este año inversiones por 1.800 millones de dólares. Desde el 2003, Ramírez, alto dirigente del oficialista MAS, fue uno de los principales impulsores de la nacionalización de los hidrocarburos.
De acuerdo a las disposiciones de Morales, Santos Ramírez debe defenderse como lo hizo en el 2007 otro ex ejecutivo de YPFB, Manuel Morales, "que quedó sin responsabilidad de tantas acusaciones", dijo el presidente boliviano.
"Sabemos de dónde venía la plata", señaló también Morales en referencia al monto asaltado, pero ordenó al viceministerio de Justicia averiguar a quiénes estaba dirigida.
Las versiones del presunto soborno fueron destacadas en los últimos cuatro días por la prensa local con base en un reporte de autor desconocido filtrado a los medios tras la captura de un grupo delincuencial que el pasado martes asesinó a O´Connor. Catler Uniservice firmó el año pasado un contrato de 86 millones de dólares para una planta productora de gas y diésel. La compañía opera también en Argentina, Brasil y la República Dominicana.
