BUENOS AIRES.- El titular del PJ, Néstor Kirchner, acordó esta semana con una docena gobernadores de provincias chicas su estrategia de nacionalizar las elecciones de octubre, pero aceptó los planteos de "provincializarlas" en distritos grandes, donde el conflicto con el campo amenaza con hacer perder la mayoría parlamentaria al oficialismo. "Sí, lo importante es ganar", explicó un funcionario cercano Kirchner con despacho en la Casa Rosada, al ser consultado sobre si el santacruceño "aceptó" los planteos de "provincializar" la elección presentados por el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti y el senador por Santa Fe, Carlos Reutemann.
Ambos dirigentes, que mantuvieron reuniones con Kirchner en Olivos -Schiaretti el jueves compartió su primer acto con la presidenta en Córdoba después de meses de distanciamiento-, plantearon despegarse del gobierno y concentrar su campaña en dirigentes locales del PJ que tienen aceptación del electorado en distritos donde se concentra la producción agropecuaria.
Kirchner en Córdoba, aceptó "por ahora" que haya "dos listas" del oficialismo, una del PJ encabezada por gente del "peronismo" alineado al gobernador Schiaretti que si bien mejoró su relación con el gobierno, ratificó su apoyo a los reclamos del campo, y otra "kirchnerista" liderada por el intendente de la Capital, Daniel Giacomino y la diputada Patricia Vaca Narvaja. En Santa Fe, el jefe del bloque de diputados kirchneristas, Agustín Rossi, insiste en encabezar la lista de diputados nacionales, pero por ahora ganaría la pulseada Reutemann con su pretensión de poner "gente del PJ" local alejada de la pelea con el agro y él encabezar la nómina de senadores nacionales.
En tanto, Kirchner decidirá "en agosto" si finalmente será o no el primer candidato del PJ en la provincia de Buenos Aires, tras evaluar el "proceso electoral, económico y social" que se desarrolle en esa provincia en los próximos meses. "Buenos Aires ya está nacionalizada", dijeron las fuentes cercanas a Kirchner que admitieron que el ex presidente será en territorio bonaerense -con el apoyo de los poderosos intendentes del PJ del conurbano-, "el gran elector" y armador de las listas y evaluará su propia postulación de acuerdo a la evolución de la oposición, y de las encuestas.
En su estrategia de "nacionalizar" la campaña y presentarla en algunas provincias como un "plebiscito" para el proyecto kirchnerista, el santacruceño consolidó esta semana -bajo el paraguas de reclamar listas de unidad en el PJ y ofrecer a cambio un generoso plan de obras públicas- el apoyo al gobierno de su esposa, de una docena de gobernadores e intendentes peronistas de provincias chicas. (DyN)