NEUQUÉN (AN) - El gobierno nacional les comunicó ayer a los representantes de las provincias que las asistirá desde el punto de vista técnico en la contingencia pero le advirtió a Río Negro que la solución más rápida para salir del paso, la colocación de capacitores en la línea, no será gratuita.

La secretaría de Energía de la Nación puso a disposición, años atrás, facilidades para colocar capacitores en las líneas de alta y media tensión, un procedimiento que mejora el rendimiento y otorga una solución más sencilla que las que requieren inversiones de fondo. Pero Transcomahue, la empresa estatal de transporte de energía rionegrina, no usó ese beneficio.

Se lo recordó ayer el subsecretario de Energía Eléctrica de la Nación, Luis Beuret, al presidente de Transcomahue, Alejandro Betelú. Lo hizo para advertirle que Nación no está en condiciones de financiar una obra que debería correr por cuenta de la provincia.

Hoy cada jurisdicción volverá a analizar la mejor manera de bajar la demanda entre las 16 y las 20 ó 22 de cada día. Técnicos de Edersa vienen hablando con los municipios sobre la posibilidad de reducir el alumbrado público.

En la ciudad de Neuquén, en cambio, el presidente de CALF, Marcos Silva, se sentará hoy con los grandes usuarios para acordar un plan de alivio de la demanda. Lo hará a regañadientes porque considera que se trata de un problema rionegrino.