Jueves 29 de Enero de 2009 Edicion impresa pag. 4 > Nacionales
Lula frenó polémicas licencias de importación
La presión de sus socios comerciales y de sus propios industriales llevó al gobierno de Brasil a anular la exigencia, que obstaculizaba con medidas burocráticas el comercio regional.

BUENOS AIRES (DyN) - Brasil anunció ayer la suspensión de la recién implantada exigencia de licencias previas para las importaciones de una gran variedad de productos, tras protestas de industriales brasileños y quejas de países vecinos, entre ellos la Argentina.

La exigencia, que abarcaba alrededor de un 60 % de las importaciones de la mayor economía latinoamericana, había sido anunciada el lunes por el Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior.

"Esa medida fue mal interpretada, causó ruidos", dijo a la prensa el ministro de Hacienda, Guido Mantega, quien insistió en que había sido adoptada para un mejor control de la balanza comercial ante la actual crisis global.

Poco antes, el propio presidente Lula le había expresado a su colega Uruguayo Vázquez "que había revocado en el día de hoy esa decisión y dado la orden correspondiente que garantiza que no se afectarán las exportaciones", señaló un comunicado oficial divulgado al término de una conversación telefónica entre ambos jefes de Estado.

Brasil revisó el sistema de licencias previas que había establecido el lunes para la importación del 60% de sus compras externas, ante la inquietud de varios socios comerciales, entre ellos Argentina y Uruguay y también el malestar que generó entre las empresas del propio país.

Según consignan medios periodísticos brasileños, la empresa fabricantes de celulares Nokkia, por ejemplo, tuvo que parar su producción ante la imposibilidad de importar los componentes de los teléfonos.

Del mismo modo, un importante número de empresas industriales brasileñas comenzaron ayer a verse en apuros para importar algunas materias primas, lo cual agravaría la delicada situación del empleo en la máxima economía sudamericana, que el mes pasado destruyó 600 mil puestos de trabajo.

Poco antes, un comunicado la Embajada de Brasil en Buenos Aires indicó que "al contrario de lo que viene divulgándose en los medios de comunicación, la licencia no automática no se trata de una barrera no arancelaria, ya que no impone restricciones a la importación". "La medida no implica el pago de impuestos y no impide el embarque de las mercaderías en los respectivos puertos de origen", señala el comunicado. También se informa que "el procedimiento se realiza de manera electrónica, por medio del Sistema Integrado de Comercio Exterior y la liberación de los bienes, automática e incondicional, sucede en un plazo máximo de diez días". A través de su representación diplomática, el gobierno vecino insistió en que la aplicación de las licencias tiene un fin exclusivamente "estadístico". "El Presidente Luiz Inácio Lula da Silva, durante la reciente Cumbre de América Latina y el Caribe sobre Integración y Desarrollo (CALC), reafirmó el repudio del Brasil a las medidas proteccionistas y contrarias a la integración económica", indica.

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí