Jueves 29 de Enero de 2009 Edicion impresa pag. 18 > Municipales
Desalojan casa por peligro de derrumbe
Es en 25 de Mayo y el grupo habitacional fue entregado en 2007.

25 DE MAYO (ACA).- Una vivienda entregada en 2007 por un programa habitacional construido por la provincia y municipio, debió ser evacuada ante el riesgo de que se caiga el techo hecho con ladrillos. Las 10 casas de ese plan deben ser reparadas por el mismo problema. Lo hará el municipio a un costo de $ 30.000 por casa.

Cada familia debe estar como mínimo un mes y medio fuera de la vivienda. La falla en los techos fue detectada antes de que se entreguen, cuando a una de las viviendas se le cayo el techo. Aún así se entregó y recién ahora se ocupan del tema.

Se trata de 10 unidades habitaciones de un programa lanzado durante la administración de Carlos Verna y del entonces intendente Jorge Poletti, denominado "PyM (Provincia y Municipio), en el que ambos compartían los gastos. Ahora las familias deben ser desalojadas y reparadas por fallas que significan serio riesgo para los moradores.

El reclamo de esas 10 familias se mantiene desde poco después que fueran entregadas por el entonces intendente Poletti, hace unos 5 años. Pero hasta ahora no lograban que alguien les creyera sobre el peligro que significa vivir en esas construcciones. Nadie desconocía los vicios de la obra, a punto tal que antes de que se entregue el plan, a una de ellas se le cayó el techo. El 1 de agosto del año pasado, el Instituto Autárquico de la Vivienda (IPAV) envió un profesional para que se ocupe del tema, pero recién seis meses después comienzan a repararlas definitivamente. Lo hará la comuna, con personal y recursos propios.

Reparará las 10 viviendas, pero deberá hacerlo de a una por vez, ya que las familias deben abandonar la casa durante un mes y medio y no hay lugar adonde alojar a 10 familias al mismo tiempo.

Esta tarea le demandará al municipio una inversión que rondaría los 30 mil pesos según explicó a este medio el vice intendente Nicanor Romero.

Cabe recordar que el 1 de agosto, el ingeniero del IPAV enviado a observar los vicios de construcción, trató de tranquilizar a los vecinos asegurándoles que era improbable que el techo se cayera, pero pareció no convencer a nadie, porque luego continuaron los reclamos que recién ahora son atendidos ante el peligro de algún accidente.

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí