CIPOLLETTI (AC)- Si la posibilidad del desalojo por el pago de alquileres y expensas pende como una "espada de Damocles" sobre la escuela 248, del barrio Doctor Salto -las 432 Viviendas-, serias anomalías en la estructura edilicia podrían postergar el inicio de clases.

Si bien es cierto que cuando el Consejo Provincial de Educación, en diciembre pasado, iba a comenzar los trabajos surgió el trámite judicial para el desalojo, que obtuvo sentencia favorable en el juzgado 3 de Marcelo Gutiérrez, ahora entre los padres, docentes e incluso los directivos, la sensación es que sobre el establecimiento se cierne otra peligrosa alternativa: la de las falencias, que ponen en riesgo el normal inicio del ciclo lectivo.

En el tema del juicio por desalojo, la comunidad educativa está movilizada y realizó una nueva movida que incluyó el corte de la transitada calle La Esmeralda. Hubo expresiones en contra de la interventora del consorcio, Mabel Rodríguez Cebrián, y objeciones al presunto desalojo que se debería efectivizar el 7 de enero -ya que en noviembre del 2008 Gutiérrez impuso un plazo de 90 días para cumplimentar el trámite- pero también se habló de la necesidad de solucionar en forma "urgente" los problemas edilicios.

El delegado regional del CPE, Matías Magallán, se refirió el mismo día de la protesta al punto edilicio, indicando que ya están previstas las partidas presupuestarias para realizar las refacciones necesarias para el inicio normal de las clases.

Las necesidades más urgentes se vinculan con el sistema eléctrico interno, muy deteriorado en algunos tramos, los paredones externos, también con mucho daño -en sectores inclusive hay riesgo de caída de material de mampostería y estructural- ventanas y pintura, además de mobiliario obsoleto.

Una vocera cercana a los padres dijo que "si bien estaría neutralizado el desalojo, ahora nos preocupa mucho el deterioro del edificio, porque así las clases no empezarían. No vamos a dejar que nuestros hijos corran riesgos innecesarios", enfatizó.

Otra mujer pidió a los funcionarios de Educación que "se pongan las pilas y solucionen los problemas en el menor plazo posible. Estamos agradecidos por las acciones contra el desalojo. En esto nos acompañan y actúan con todo. Pero ahora la otra prioridad son los arreglos", enfatizó la mujer.

Si bien no se confirmó pudo saberse la directora de la 248, Ana María Fernández, entregará en la supervisión del CPE en calle Mengelle una nota reclamando la intervención urgente de las autoridades pertinentes para arreglar su escuela.

"A más tardar mañana o el viernes la nota estará allí y detallará acerca de las falencias que hay que arreglar para que empiecen las clases. Si no, no dejaremos que entren nuestros niños", dijo una vecina de buenos vínculos con docentes y directivos del jaqueado establecimiento del barrio Salto.