VIEDMA y NEUQUEN (AV/AN)- El Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) aprobó una obra destinada a mejorar y equilibrar tensiones en el área de Villa Regina. No es la solución de fondo, que es mucho más costosa y compleja.

Otorgó permiso a Edersa, a partir de un pedido formulado por la transportadora Transcomahue, para instalar tres celdas de 13,2 kV con todo su equipamiento asociado.

El trabajo, que aún no tiene fecha de comienzo, se ubica en la zona de la estación transformadora de esa ciudad.

Tanto Edersa como Transcomahue deberán firma un convenio complementario y una puesta en marcha la obra se deberán tomar los recaudos dentro del Programa de Gestión Ambiental (PGA).

La resolución 22 del ENRE fue publicada en el Boletín Oficial de la Nación del 23 de enero pasado.

Solución

La solución de fondo consiste, primero, en recuperar la turbina de la central térmica de Turbine Power, que fue construida a principios de los 90 para casos de crisis energética.

Pero además un sistema confiable tiene doble suministro. La obra de anillado del Alto Valle cuesta 20.000.000 de dólares, reveló el presidente de Transcomahue, Alejandro Betelú.

Los neuquinos se quejan de que la salida de servicio de una usina que fue construida a instancias del gobierno rionegrino, afecte todo el sistema regional. Sostienen por lo bajo que no se hicieron las inversiones que sí se llevaron adelante del otro lado del río Neuquén.

Lo cierto es que el sistema de alta tensión en 132 kV está integrado porque no fue construido ni por Neuquén ni por Río Negro, sino por Agua y Energía Eléctrica, la empresa estatal nacional que fue dividida y privatizada en los 90.

Es llamativo, por otro lado, que teniendo una red regional, las dos provincias no trabajen en conjunto. Tienen instalaciones comunes que, en vez de operarlas de manera coordinada, se manejan con responsabilidades distribiudas: el EPEN pone las instalaciones y Transcomahue, el personal.