Sergio Batista actuó y dijo las cosas que todos, al menos en Argentina, querían escuchar: "Antes del torneo, por la clase de jugadores que tenemos, no pensé que íbamos a terminar de esta manera. Tengo mucha confianza que el equipo va a jugar como yo pretendo", aseguró el "Checho".
El entrenador no buscó factores externos para tratar de disimular las falencias internas. Sus declaraciones fueron francas.
El seleccionado sub 20 clasificó a duras penas y jugando mal al hexagonal final del Sudamericano y ahora la prioridad, además de meterse entre los cuatro que irán al Mundial de Egipto, es mejorar en lo futbolístico.
A la espera del próximo rival, Batista no podrá contar con dos futbolistas claves en su consideración, porque Iván Bella y Fernando Meza recibieron tarjetas por parte del árbitro brasileño Fagundes. "Son dos jugadores muy importantes para nosotros. Había pensado en cambiarlos de posición. Igual tenemos jugadores que están a la altura y que los pueden reemplazar muy bien", explicó el barbado entrenador.
Por último, el "Checho" se mostró preocupado por la forma en que llegó el segundo tanto ecuatoriano (fue 2-2). "Hay que corregir errores porque no puede ser que nos hagan un gol así de cabeza. Lo que más destaco es la actitud de los chicos, que hicieron lo imposible por continuar. Los tiempos cambiaron mucho, se emparejó todo", concluyó.
Franco Zuculini fue tan claro como su técnico: "Fue todo sufrimiento, pero de todas las cosas se aprende. Tenemos días para corregir lo malo y vamos a meterle para adelante porque ahora empieza otra etapa", dijo el volante.
El próximo rival se conocía anoche y salía del choque entre Uruguay, líder del grupo B con 9 puntos, y Brasil, que estaba con 7. "Todos los partidos son difíciles, que venga el que tenga que venir", cerró Zuculini.
