NEUQUÉN (AN).- El ex funcionario del gobierno provincial, Aníbal Giustozzi, desmintió ayer terminantemente la acusación de la Central de Trabajadores Argentinos, que lo responsabilizó de ocupar tierras pertenecientes a una familia en Cajón del Guañaco.
Giustozzi dijo que el campo en cuestión fue comprado por su padre "hace casi tres décadas, y que cuenta con el título de propiedad que así lo acredita.
"Esas tierras poseían título de propiedad, y se transfirieron por escritura pública a favor de mi padre, en una clásica transacción entre privados", aseguró.
Agregó que luego de la "correspondiente conformidad de linderos, fue replanteada la mensura sobre el terreno y en función de ella se materializaron los alambrados, los que datan de comienzos de los años ochentas y jamás fueron modificados".
Quienes lo acusan de usurpar tierras ajenas son los integrantes de la familia Fonseca.
Giustozzi dijo que las tierras que "ellos reclaman son parte de un derecho de pastaje otorgado anualmente por la Dirección de Tierras, por lo que en los años ´80 la localización de las tierras era aproximada, por falta de mensura. Era un predio lindero al límite oeste de la propiedad de mi padre", dijo el ex funcionario, y agregó que una vez establecidos los límites "ese error se subsanó".
Sostuvo que en el título de propiedad se "pueden ver perfectamente" las dimensiones del campo.
Y acusó a la familia Fonseca de "amenazas, invasión, atropello y usurpación", a partir de una causa "judicial en trámite" que inició. "Utilizan al gremio para mentir sobre el corrimiento de un alambrado que se encuentra hace casi tres décadas en el mismo lugar", aseguró.
La CTA acusó públicamente esta semana a Giustozzi de haber acreditado su permanencia en el lugar desde 1986, y hacerse de 100 hectáreas de las 300 que ocupa Elciera Fonseca.
Giustozzi dijo que "sólo estuve cuatro meses como funcionario de Desarrollo Territorial", para pasar a desempeñarse en la planta de ese organismo, pero sin cargo de funcionario, como empleado de planta permanente.