PARÍS (AP).- Las autoridades de Francia pusieron ayer en acción a 10.000 trabajadores de recuperación, mientras España permitió el regreso a casa de personas desalojadas un día antes por los fuertes vientos que dejaron 18 muertos en el suroeste francés y el noreste español.
De acuerdo con funcionarios de España, al menos 12 personas murieron en hechos relacionados con el temporal de viento, incluidos cuatro menores al caer parcialmente un centro deportivo en Barcelona. Esta ciudad está de duelo por la muerte de los cuatro niños que se habían refugiado del ventarrón en la parte del centro deportivo que se vino abajo, dijo el gobierno regional.
En un comunicado, el gobierno de la región informó asimismo que unos 40.000 usuarios de la compañía eléctrica FECSA-ENDESA se habían quedado sin el servicio por el temporal. El transporte, en sus diversas modalidades, fue suspendido en numerosas partes del país por los vientos, con ráfagas de hasta 198 kilómetros por hora, de acuerdo con el organismo meteorológico de España.
Los bomberos enviaron ayer aviones para combatir los incendios forestales que surgieron en los municipios orientales de La Nucia, cerca del centro turístico de Benidorm, y Genovés.
Alrededor de 14.000 personas que fueron desalojadas de varias comunidades cercanas a colinas en llamas recibieron autorización para regresar a sus casas, dijo el funcionario regional Serafín Castellanos. El tren bala que corre entre Madrid y Barcelona reanudó las operaciones una vez retirados los escombros de la vía, pero el recorrido hasta Francia no operó ayer, dijo la firma Renfe. No mencionó la fecha para el restablecimiento.
En Francia se reportaron por lo menos seis decesos, entre ellos una pareja envenenada con monóxido de carbón de un generador que encendieron en la noche del sábado durante un apagón en la región de la Dordogne, dijeron autoridades.
Entre el zumbido de las sierras eléctricas, las cuadrillas de limpieza se afanaron en ambos lados de la frontera franco-española para cortar árboles caídos sobre casas, reparar tendido eléctrico, vías de tren y carreteras y retirar escombros. "La preocupación central es restablecer la electricidad lo más pronto posible", señaló el presidente francés Nicolás Sarkozy en el centro de atención a crisis en Burdeos.
La empresa ERDF, subsidiaria de Electricite de France, dijo que había restablecido el servicio a 600.000 usuarios entre los 1,7 millones que se quedaron sin energía el sábado.