El empresario Leonardo Bergara, secuestrado el 22 de diciembre en la localidad bonaerense de Ranelagh, fue hallado sano y salvo ayer por la mañana en la casa en construcción de un policía que quedó detenido, en la localidad de El Pato, partido de Berazategui.

Bergara fue liberado tras un cautiverio de 33 días, luego de que su familia pagara un rescate de 230 mil dólares en la ciudad de Pinamar. Por la tarde declaró durante más de 5 horas en la Fiscalía de Quilmes, tras lo cual se reencontró con su familia.

Luego relató a la prensa que sus captores, pese a mantenerlo siempre encapuchado, lo trataron "muy bien" y que le "dieron de comer bien" durante los 33 días de encierro. "Me trataron muy bien. La verdad es que se portaron muy bien todos", dijo respecto a sus captores. Sobre las pruebas de vida que brindó a su familia grabando los títulos de los diarios, Bergara explicó: "Nunca leí nada, ni noticias. Me las decían y yo las repetía. Nunca vi. nada, siempre estuve encapuchado". Aseguró que la odisea la vivió "con la fuerza del espíritu" y agradeció a quienes se preocuparon mientras estuvo secuestrado. Pero se negó contar detalles sobre el secuestro.

En tanto, el gobernador Daniel Scioli, advirtió que quiere a "todos" los captores "presos".

El empresario fue encontrado pasadas las 8, luego de que un llamado al 911 advirtiera a la policía que el secuestrado se encontraba en una casa situada en 535, entre 635 y 636. Los primeros policías en llegar a constatar la versión, descubrieron que la propiedad era del oficial Jorge López, quien es jefe de calle de la subcomisaría El Pato, por lo cual lo convocaron.

López, junto a un vecino que ofició de testigo y un albañil que llegó al lugar para trabajar en la construcción, rompió un candado que había sido colocado por extraños la noche anterior. Al ingresar a la vivienda hallaron a Bergara encadenado y, según una foto sacada con un teléfono celular, vestido con una remera roja, despeinado y con la barba crecida. Minutos después, el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, se comunicó telefónicamente con Bergara y éste le confirmó que sus captores lo habían llevado a esa casa durante la medianoche.

"Daniel, fue el día más difícil", fue lo primero que le dijo Bergara al gobernador, para expresar cómo se sentía. El mandatario explicó que la angustia manifestada por Bergara obedecía a que "cuando lo trasladaban de un lugar a otro pensaba que era para ponerlo en libertad y se encontró de golpe, encerrado y encadenado de vuelta y fue el día en que pasaron un montón de cosas por su cabeza, obviamente en el lugar donde lo encontraron".

En tanto, el ministro de Seguridad bonaerense, Carlos Stornelli y el juez federal de Quilmes, Luis Armella, concurrieron al lugar donde fue hallado Bergara. Stornelli aseguró que el empresario Leonardo Bergara "para nada" fue maltratado durante sus 33 días de cautiverio. El funcionario sostuvo que el empresario "tenía todos los signos físicos de un cautiverio prolongado".

Pasado el mediodía el oficial López, junto a tres albañiles que trabajan en la casa del hallazgo de Bergara se presentaron ante la fiscal federal de Quilmes a cargo de la investigación, Silvia Cavallo, y quedaron detenidos.

Hasta el momento había dos policías detenidos, tres prófugos y uno más a disposición de la Justicia por el caso. (Télam-DyN)