Los diputados nacionales por Río Negro Hugo Cuevas, Juan Carlos Scalesi y Jorge Cejas figuran en la lista de legisladores que el año pasado no emitieron palabras durante las sesiones de la Cámara Baja, según un informe de la revista "Parlamentario".
En total suman 35 los diputados nacionales que no hablaron durante el año. Esto es un 13,6% de una cámara integrada por 256 diputados, donde todavía no ha podido jurar el convaleciente socialista K Jorge Rivas. Sí incluye el listado elaborado por "Parlamentario" al salteño Marcelo López Arias, con apenas cuatro palabras, pero una salvedad: estuvo prácticamente todo el año de licencia por representar al Estado al frente de la Sociedad Operadora Ferroviaria.
La lista de "silenciosos" es la siguiente: José Luis Barrionuevo, Marcela Bianchi Silvestre, Gloria Bidegain, María Araceli Carmona, Jorge Alberto Cejas, Rosa Chiquichano, Hugo Cuevas, Ariel Dalla Fontana, Francisco de Narváez, Marcelo Fernández, Margarita Ferrá de Bartol, Juan Carlos Dante Gullo, José Alberto Herrera, Julio Rubén Ledesma, María Laura Leguizamón, Stella Maris Leverberg, Timoteo Llera, Rafael López, Ana Luna de Marcos, Jorge Montoya, Carlos "Cuto" Moreno, Mabel Müller, Marta Osorio, Raúl Paroli, Mirta Pastoriza, Jorge Pérez, Héctor Porto, Jesús Rejal, Evaristo Rodríguez, Carmen Román, Cipriano Rossi, Juan Carlos Scalesi, Juan Carlos Sluga, Gladis Soto y Gustavo Zavallo.
Integra el cuerpo, pero recién asumió en las últimas sesiones, la neuquina Silvia Sapag, quien reemplazó en la banca al no muy hablador Oscar Massei (144 palabras) y lógicamente no puede ser incluida en este informe.
Como todos los años, "Parlamentario" realiza un análisis cuantitativo de las sesiones realizadas a lo largo del 2008, con el objeto de detallar la participación de los diputados nacionales en los debates.
Y vale remarcar la palabra "cuantitativo", por cuanto en este caso más que en ningún otro, seguramente, la cantidad de palabras que cada legislador emite no necesariamente es sinónimo de calidad.
Esto es, podrá haber legisladores que no paran de hablar, pero no por ello serán los más precisos y contundentes.
O tal vez sí, pero la cuestión es que este informe elaborado una vez más por el Índice de Calidad Legislativa de Semanario "Parlamentario" sirve para determinar la cantidad de palabras emitidas por cada legislador a lo largo de un 2008 que se caracterizó por devolverle al Parlamento un protagonismo perdido.
En efecto, a partir del conflicto con el campo y su correlato en maratónicas sesiones del Congreso de la Nación, ese ámbito se convirtió como pocas veces en el eje de la actividad política.
Algo sólo comparable en los últimos años con las sesiones de ese verano caliente 2001/2002, en el que el Congreso debió elegir sucesivamente cuatro presidentes tras la renuncia de Fernando de la Rúa.