VIEDMA (AV)- El patrimonio inmobiliario afectado por el nuevo asentamiento de la ciudad rondaría los 8,8 millones de pesos, según algunas consultas con operadores privados del mercado, sin contar la depreciación que podría castigar a cada propietario como consecuencia de estos hechos protagonizados por más de 200 familias.

El sector reuniría a unos 160 lotes cuyo valor rondaría en promedio los 55.000 pesos, estimándose que si se ofertan sin servicios podrían cotizarse a unos 50.000. En caso de incluirse en las ofertas los tendidos mínimos de cañerías de agua y eléctrico, más cordón-cuneta; los valores apuntarían a los 65.000 pesos.

Los mapas que existen sobre el sector dan cuenta de la mencionada cantidad de lotes. Sin embargo, existen algunos datos confusos como consecuencia de que los ocupantes transitorios habrían concretado -informalmente- subdivisiones irregulares que ocasionarán los superposición de las delimitaciones primigenias, aumentando la cantidad de cada parcela.

Recién ahora se pudo constatar la verdadera dimensión con cada subdivisión espontánea, dado que hasta hace poco tiempo atrás, sólo unos pocos terrenos estaban señalizados visualmente.

El resto se presentaba a la vista de cualquier transeúnte como un extenso predio que desde la avenida Zatti se podía observar un tramo de la ruta provincial 1, ubicada a por lo menos seis cuadras entre un lugar y otro.

Entre los 8,8 millones de pesos deberían contabilizarse una porción de 10.000 metros cuadrados del predio ocupado, que una antigua familia de esta ciudad estaría negociando con una cadena de supermercados, y en el que sólo hasta la actualidad habría un acuerdo verbal de transferencia. Esa porción también cayó en manos de los ocupantes como otros sectores de espacios verdes.

Según las fuentes privadas consultadas por este medio, al menos las negociaciones estaban bien encaminadas hasta una semana atrás, cuando comenzó a crecer el asentamiento.

En el marco de estas conversaciones por la transacción inmobiliaria, los actuales propietarios ya presentaron formalmente una denuncia por usurpación ante los tribunales de esta capital.

Los protagonistas de la toma volvieron ayer a presentar una nota ante los despachos municipales solicitando una pronta respuesta al pedido de diálogo, con el propósito de encontrar una solución al problema de emergencia habitacional. Sin embargo, no consiguieron ser recibidos por el intendente Jorge Ferreira.

También resultaron infructuosos los esfuerzos de los propietarios que iniciaron gestiones ante el jefe comunal para integrar a los ocupantes transitorios a las discusiones en el despacho municipal.