La Policía Federal custodiará finalmente desde hoy a inspectores del gobierno porteño que impedirán el ingreso a la Villa 31 y 31 bis, del barrio de Retiro, de materiales destinados a la construcción en altura. El ministro de Justicia y Seguridad, Aníbal Fernández, formuló este anuncio luego de la agria polémica mediática que, en los últimos días, mantuvo con el jefe de Gobierno capitalino, Mauricio Macri, por esta cuestión.
El mandatario comunal confirmó que habrán tareas conjuntas, elogió la decisión, pero renovó las acusaciones contra el funcionario nacional, al que lo volvió a acusar de "mentir" por su interpretación de un fallo judicial vinculado al control de la construcción en altura del asentamiento.
La Comuna adelantó que, "en cumplimiento con lo dispuesto por la jueza federal Cecilia de Negre, a partir de mañana se constituirán retenes a cargo de la Policía Federal en cinco puntos de acceso a las villas 31 y 31 bis, para impedir el ingreso de material de construcción de nuevas edificaciones".
Esos retenes estarán integrados por personal de la Agencia de Control Comunal "debidamente capacitado", el cual estará allí para impedir el ingreso de todo material, salvo el "destinado a mejoras y refacciones de edificaciones ya existentes".
"La instalación de los retenes tiene como objetivo cumplimentar la resolución judicial 28 de octubre de 2008 que ordena al Estado Nacional que impida la construcción de nuevas edificaciones en las Villas 31 y 31 bis", fue la interpretación que dio la Ciudad.
Sin embargo, la interpretación del ministro fue otra, ya que recordó que cuando la Justicia le ordenó impedir el ingreso de materiales de construcción para altura en la Villa 31, en respuesta a un reclamo del gobierno capitalino, él mismo respondió que no estaba en condiciones de satisfacer ese pedido. Aníbal Fernández adelantó que asignará efectivos de la Policía Federal para custodiar al personal municipal. (DyN)
