SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB) - La polémica desatada ayer por una publicación nacional sacudió la burocracia del Ejecutivo, que corrió a sacar los carteles de "prohibido bañarse y pescar" con que mantenía cerrado un balneario de lago Moreno.
En la premura por retirar los controvertida cartelería que denunciaba la alta contaminación del lugar, la playa quedó abierta al uso público sin guardavidas, boyado ni señalización.
La semana pasada el DPA difundió los resultados parciales del último monitoreo que indicaban una significativa reducción de los niveles de contaminación y la aptitud de las aguas para uso recreativo. No obstante lo cual el balneario continuó cerrado en espera de la habilitación municipal.
El intendente Marcelo Cascón tenía el informe del DPA desde el viernes 16 pero los funcionarios responsables de abrir la playa recién la recibieron ayer.
La misma lentitud afecta el diagnóstico de situación del Mallín del Km. 12 y Bahía Serena, donde la presión urbanística de los últimos años pone en riesgo la salubridad de un frágil ecosistema.
Las acciones a desarrollar en el lugar dependen de un estudio integral encargado al Centro Regional de la Universidad del Comahue, que tiene un costo total de 20.000 pesos.
Los resultados preliminares están listos desde diciembre pasado pero el municipio no dispone de ellos porque todavía no pagó el anticipo de 7.000 pesos comprometido.
El titular del diario "La Nación" que sostuvo que "Es alta la contaminación en los lagos de Bariloche" generó todo tipo de quejas y comentarios en las radio locales y llegó a ser tema excluyente en algunas emisoras.
El matutino porteño generalizó la denuncia de contaminación a los demás lagos que ordena la ciudad.
Otros oyentes fustigaron al municipio por la inacción que permitió la contaminación y dañó "imagen turística" de Bariloche.
El subsecretario de Medio Ambiente, Luciano Signore, se quejó a "Río Negro" por la sobre dimensión de la nota a la que calificó de "por lo menos extemporánea".
El funcionario se defendió asegurando que no tiene ninguna participación en la habilitación de los balnearios, que dependen del área de Deportes.
El monitoreo que obligó a cerrar el balneario en los últimos días de 2008 detectó 573 vacilos de Escherichia Coli, por cada 100 ml. de agua, tres veces más que el límite de aptitud para bañarse en cualquier espejo de agua, establecido en 200 vacilos por cada 100 ml.
La contaminación de la costa este del Moreno -alarmante en comparación con las playas públicas de la ciudad- fue consecuencia del mal funcionamiento de la planta depuradora de líquidos cloacales del barrio Dos de Agosto, volcada al lago a través del mallín de la urbanización El Redil.
Las obras paliativas para remediar la deficiencia de esa planta y evitar nuevos vuelcos al lago debieron concluirse el martes pasado pero ayer Signore confirmó a este diario que "hay algunas demoras" y que los trabajos recién estarán terminados a fin de mes.