Los propietarios de los terrenos tomados ayer en Viedma plantearon al intendente Jorge Ferreyra que actúe rapidamente ante la incertidumbre de perderlos.

Durante una reunión concretada este martes, acordaron que el municipio acompañará las denuncias penales que se efectuaron esta mañana en la Justicia. Al abandonar su despacho, Ferreyra se negó a atender a los “okupas” del Barrio Santa Clara, quienes nerviosamente reclamaron una audiencia. Colaboradores del intendente mantuvieron un entredicho y prometieron  que éste los recibiría mañana.

La toma comenzó ayer cuando unas 150 familias -con casi 20 años deambulando por oficinas en demanda de viviendas o terrenos- ocuparon por la fuerza un predio de dos hectáreas para levantar precarias casillas. El acto se concretó sobre terrenos privados ubicados al Este de la ciudad. 

Agencia Viedma