La primera jornada del Abierto de tenis de Australia no deparó sorpresas para el cuarteto de candidatos, que pasó a la segunda ronda. Dos de esos integrantes son los criollos Juan Martín del Potro y David Nalbandian; y los otros dos, el campeón defensor Novak Djokovic y el que para muchos ya es el mejor de la historia, Roger Federer.

El suizo comenzó con un sufrido triunfo en el primer Grand Slam de la temporada: se impuso a Andreas Seppi por 6-1, 7-6 (4) y 7-5 tras dos horas y media de lucha ante el número 34 del mundo. "Es un rival duro", dijo Federer, segundo favorito en Melbourne, donde ya ganó tres veces.

Djokovic también debutó con éxito en tierras australianas y dejó en el camino a otro itálico, Andrea Stoppini, número 220 del mundo, por 6-2, 6-3 y 7-5. "Cometí demasiados errores no forzados, él mejoró, pero es bueno haber ganado en sets corridos", dijo Novak sobre el tercer set, que arrancó 0-4.

Un par de turnos antes, "Delpo" festejó su mejor ranking con un claro triunfo sobre el alemán Mischa Zverev por 6-3, 6-4 y 6-2.

"Necesito mejorar mucho mi servicio, mi volea. Necesito tiempo, quizás en unos meses pueda estar allí", dijo el tenista de Tandil, que el sábado ya se alzó con su primer título del año, en Auckland, y se empieza a transformar en una gran amenazas para los top 5.

Algo más sufrido fue la victoria de Nalbandian, décimo favorito y reciente campeón de Sydney, quien venció al francés Marc Gicquel por 6-1, 4-6, 6-2 y 6-3. De esta forma, los mejores singlistas argentinos se sumaron a Brian Dabul, el primero que sacó pasaporte para la segunda instancia. La racha se cortó Agustín Calleri, quien perdió ante Guillermo García-Lopez, por 3-6, 7-6 (7-5), 6-2 y 6-0.

De nuevo en el tema favoritos, en la madrugada de hoy es el turno de Andy Murray y Rafael Nadal, quien este año tendrá la difícil misión de cuidar el número 1 del planeta.

Lejos de los cuatro "de punta", asoma Andy Roddick, quien habló del tema, quien arrancó con una cómoda victoria (ante Bjorn Rehnquist por 6-0, 6-2 y 6-2) y sueña con dar el gran golpe.

"Se merecen ser los mejores y que se hable de ellos. Mis resultados el año pasado, especialmente en los Grand Slams, no permiten que se hable de mí", dijo. "Nadie se acuerda del ayer en el deporte y es justo. Uno tiene que salir ahí fuera y demostrar día a día. No tengo ningún problema con eso", agregó.