El jefe de Gabinete, Sergio Massa, justificó ayer la política de reducción de los subsidios a las tarifas de servicios públicos dispuesta por el gobierno, al señalar que ello obedece a la recuperación económica de los últimos años y a una aplicación más justa de tal subvención estatal.
En declaraciones periodísticas, el Jefe de Gabinete detalló que "lo que se está haciendo en este momento es ordenar (la asignación de subsidios) para que el impacto en las cuentas públicas sea menor, pero también para que tenga una lógica desde el punto de vista de quien paga".
"Los subsidios nacieron para contener tarifas cuando no se había abierto en la Argentina un proceso de recuperación salarial y había un nivel de desocupación muy alto", explicó Massa, quien agregó que "ahora esa política de subsidios se vuelve a equilibrar de acuerdo al poder adquisitivo" de la población.
"Sucedía, por ejemplo, que en Tigre un vecino de Las Tunas pagaba el gas de garrafa muy caro y un vecino de Nordelta tenía el gas natural a tarifa subsidiada", agregó.
Refirió que "la mejora en la situación del mercado de trabajo y la discusión de los salarios se vio acompañada de un proceso en el que se mantenían los subsidios como un aliciente para el bolsillo de algunos sectores", pero consignó que "lo que significaban tales subsidios en términos fiscales era muy importante". "Siempre ante una decisión que modifica tarifas pueden haber sectores que la discutan, pero lo que se está haciendo es normalizar la situación de tarifas, equilibrando hacia adelante las cuenta públicas", señaló el funcionario. En el último tramo del 2008 el gobierno activó ajustes en las tarifas residenciales de gas y electricidad, reduciendo progresivamente los subsidios.