SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La Asamblea del Ñirihuau consiguió el sábado una importante adhesión de vecinos y turistas que estamparon su firma contra la polémica exploración y explotación petrolera prevista en la cuenca del río Ñirihuau.

En tan sólo tres horas recolectaron más de 300 firmas en la mesa instalada frente al Banco Nación, donde distribuyeron volantes que advertían la inevitable contaminación de la cuenca que desemboca en el lago Nahuel Huapi y el río Limay.

Entre los transeúntes que se detuvieron atraídos por los volantes y el cartel de protesta ilustrado por Gabino Tapia hubieron muchos turistas de origen chileno y brasileño se mostraron preocupados y engrosaron los listados con su rúbrica. "Para esto no hay fronteras" sostuvo uno de los visitantes trasandinos.

La junta de firmas comenzó a gestarse en diciembre pasado cuando la asamblea realizó su primera campaña de concientización repartiendo volantes en el mismo lugar. "En esa oportunidad la gente nos preguntaba dónde había que firmar y nos dio la idea", recordó José Games

Como entonces la agrupación sigue reclamando la realización de una audiencia pública que, pese a contar con el compromiso de la provincia y el municipio, todavía continúa sin fecha de convocatoria.

Sin consulta

El gobierno de Miguel Saiz adjudicó la exploración del área Ñirihuau a la UTE YPF-Pluspetrol sin ningún tipo de consulta a la comunidad afectada ni estudio de impacto ambiental previo.

El área concesionada linda con las nacientes del río Ñirihuau y con el Parque Nacional Nahuel Huapi que, pese a estar a tan sólo tres kilómetros del futuro emprendimiento, no planteó ningún tipo de objeción.

Rubén Marigo, de la Comunidad del Limay, confió a "Río Negro" que "el Codema le informó a la Asamblea que (la adjudicataria) todavía no presentó el estudio de impacto ambiental y reafirmó su postura de estudiar lo que presente la empresa".

En los panfletos distribuidos se advertía que "toda actividad petrolera contamina" y que "los derrames de petróleo que se produzcan afectarán directamente al río Ñirihuau, al lago Nahuel Huapi y la cuenca del Limay" impactando en la "vida humana y animal". Tras la importante adhesión la asamblea se propuso profundizar la campaña de concientización y recolección de firmas, "como hecho político", para reclamar la revisión de la licitación y la realización de la audiencia pública.