NEUQUÉN (AN).- Un joven de 17 años perdió un ojo luego de recibir un disparo de un arma calibre 22 realizado por otro joven. Ocurrió el viernes a las 23 en plena vía pública.
La familia de la víctima, que está con vida pero con el proyectil alojado en la parte anterior del cráneo, manifestó ayer que, a dos días de ocurrido el hecho, no hubo diligencia policial alguna, pese a que ellos dicen haber identificado al autor del disparo y también conocer el domicilio donde viviría esta persona.
El joven que recibió el disparo se llama Milton Bejarano y tiene 17 años. Estudia y trabaja como pintor junto a su suegro.
El viernes por la noche había bajado junto a su novia del ramal 8 de la empresa de colectivos Indalo, en cercanías del barrio Villa Ceferino.
Junto a la chica, iban a comer en casa de los padres de ella. Caminaban por la vereda, cuando en la intersección de Combate de San Lorenzo y Antártida Argentina se encontraron con dos jóvenes.
Según relató el padre de Milton, Jorge Aníbal Bejarano, no hubo riña alguna. "Le gritaron alto; mi hijo y la novia se pararon, y uno de los pibes le apuntó y le disparó", describió.
Agregó que la pareja pudo salir corriendo. Se detuvieron en una verdulería, que no les dio cobijo, afirmó.
"Les dijeron que salgan; mi hijo estaba ensangrentado por el disparo. Pero afuera un testigo llamó a la policía y luego lo derivaron a la sala de salud del barrio El Progreso", contó. El joven está internado en el Hospital Castro Rendón.
La familia acusó a efectivos de la comisaría Tercera de no intervenir.
"Mi hijo perdió un ojo, a nosotros nos dan un golpe durísimo en nuestra vida; un pibe estudiante y trabajador, que no molestó nunca a nadie, pero no hacen nada. Cómo puede ser que nosotros sepamos quién es el autor del disparo y ellos todavía ni se movieron", agregó.
Ayer a última hora la policía informó de dos allanamientos que no arrojaron resultados para la investigación.