"Sí, me he peleado con (el senador) Pichetto (Miguel) y con (el ministro de Gobierno de Río Negro) Rodríguez (José Luis)", reconoció ayer López frente a la masiva concurrencia plenaria.

Sobre Rodríguez, dijo que el funcionario había estado en el edificio central del gremio a las 14 del sábado solicitando que haya un acuerdo y se acepte la conciliación.

"Pero yo le reclamé que no mande al BORA (grupo antidisturbios de la Policía de Río Negro) porque entonces las cosas se van a agravar", y luego, en una expresión que causó alguna sorpresa, deslizó que el ministro había sido "echado" del edificio.

Y respecto de Pichetto, López -no sin antes sincerarse, desde su cargo sindical, de su filiación peronista- sentenció que no tenía compromisos con nadie, que no era "obsecuente", que el senador también había gestionado para que solucionen sus diferencias con CAFI y acepten la conciliación, que "alguna vez nos dio una mano" con un laudo que al final fracasó y que le había aclarado que le manifieste a la presidenta Cristina Fernández y al ministro Carlos Tomada "que no nos van a imponer ni obligar".

"Ningún partido se ha preocupado. Tampoco la provincia ni la Nación", precisó y advirtió que a "todos los que nos jueguen en contra les vamos a dar la espalda".

Acuerdo

El Sindicato del Hielo acató la conciliación obligatoria y su titular Rolando Troncoso concurrirá mañana a la paritaria en Buenos Aires, aunque exigiendo el 32 por ciento de aumento. Y, como es sabido, los rurales ya acordaron y están fuera de esta vorágine de desencuentros.