EL HUECÚ (AN).- Los hermanos Oñate siempre soñaron con poder escriturar las 500 hectáreas del campo que sus padres pioneros habían comprado a principios de los ´60.
Y hace algún tiempo fue la provincia la que les ofreció hacer el trámite gratis, pues tenían toda la documentación que necesitaban para ello.
El caso es que, una vez escriturada, la Dirección Provincial de Tierras dejó fuera de la propiedad casi 200 de las 500 hectáreas que indicaba el boleto de compraventa.
Pero esto no fue todo: también avanzaron las alambradas de las tierras que la provincia les sacó como reserva fiscal y quien las está utilizando es nada menos que el secretario de Gobierno de El Huecú, Diego Puentes.
"Nosotros queríamos la escritura más que nada pero no firmamos porque nos sacan casi 200 hectáreas, que son las mejores que tiene el campo y ahora esas tierras las tiene el vecino Puentes", afirma Enriqueta Oñate, la mujer que lleva la voz cantante en el campo de "La Y".
El campo de los Oñate está entre los cerros, bien alto. Se llega por un faldeo que bordea al río Agrio.
Por el camino de tierra saltan liebres de tamaño exagerado. Y la vegetación se hace más espesa porque las laderas explotan de agua.
Es por eso que abundan los verdes intensos que tapizan totalmente la tierra negra, generosa en humus.
El camino es amable, como recién emparejado, hasta la tranquera de los Puentes. Y pedregoso y desnivelado hasta el portón que antesala la casa de los Oñate. Las máquinas que emparejan sólo llegan hasta la primera posta.
"Acá hubo una maniobra muy clara en perjuicio de la familia Oñate; es una metodología mucho más común de lo que se cree y que claramente perjudica a esta gente es que la legítima propietaria de ese campo", explicó el abogado Juan Patricio Méndez, quien el pasado 12 de noviembre denunció el caso primero ante la Policía y luego en el juzgado de Chos Malal.
Los Oñate -Francisco, Enriqueta y Manuel- tienen entre 72, 68 y 62 años y pocas veces bajan al pueblo. Son felices en su campo de ensueño donde crían corderos, vacas, chivas, caballos y aves de corral.
Los Puentes son una dinastía en El Huecú. Ángel Puentes, hermano de Diego, fue intendente del pueblo entre 1998 y 1999, cuando lo suspendieron. Tres años más tarde lo condenaron a tres años de prisión condicional por peculado.
"No es un problema mío"
"Éste no es un problema mío, me apuntan a mí porque soy funcionario público. Este campo era de mi abuelo y lo heredó mi madre. No sé por qué se habla tanto de Diego Puentes cuando el campo es de toda la familia. Encima, en Tierras ahora dicen que se perdieron papeles, creo que hay gente detrás de todo esto, que no son los Oñate", afirmó Diego Puentes al ser consultado por este diario.
"Hace más de 40 años que mi familia tiene ese campo: hay una parte que ahora dicen que era de la provincia y qué sé yo cuántas cosas. Esperemos que la Justicia resuelva y veremos", cerró.