Tras el accidente, el Centro de Experimentación y Seguridad Vial de Argentina (CESVI) difundió una estadística que indica que "los jóvenes de entre 21 y 35 años participaron en casi el 50 por ciento del total de los siniestros de tránsito ocurridos en los últimos tres años, entre ellos por picadas callejeras, velocidad, por inexperiencia al volante, consumo de alcohol, cansancio y conducción nocturna".

En particular, Hernán De Jorge, de Cesvi, analizó que "las picadas callejeras tienen un componente muy emocional y pasional. Y como cualquier otra actividad automovilística, se nutre de la rivalidad. Pero lo peligroso es que en este caso, esa rivalidad no está controlada por nadie. Durante las picadas, en pocos segundos se debe alcanzar un nivel de velocidad que ampliamente supera los límites legales".