NEUQUÉN (AN).- En la madrugada de ayer, pasadas las 2, dos jóvenes amenazaron a un vehículo con lo que en un primer momento se creyó que eran pistolas nueve milímetros. Pero lo que aparentó ser un auto particular fue finalmente un móvil no identificado de la policía con efectivos de civil a bordo, por lo que la amenaza con armas derivó en una percusión a sus portadores: uno logró escapar y el otro, que resultó herido en la huida, fue detenido.

Luego se comprobó que los dos jóvenes habían amenazado con réplicas a los agentes, aunque de todos modos se abrió una causa judicial y, en medio del operativo, se desató un furioso ataque a pedradas de los vecinos contra los móviles de la policía que llegaron para asistir.

Un hecho similar se registró más al oeste, en Gran Neuquén Norte, donde cerca de las 21:30 del jueves, la comisaría 18 fue apedreada por un grupo de jóvenes, con roturas de vidrios y de la fachada del edificio y que derivó en la detención de dos hombres.

Según el comisario Libio Alveal, en Cordón Colón, cerca de las 2 una patrulla del departamento de Toxicomanía de la policía -que no se identifican y que son manejadas por agentes vestidos de civil- fue interceptada por dos jóvenes. "Apuntaron, los dos, con armas de fuego. Al intentar los efectivos la demora, se dieron a la fuga y arrojaron las armas, que luego se determinó que eran de plástico", señaló.

En la persecución, uno de los dos hombres logró huir -se internó en la toma Auca Mahuida- y según la información oficial, el otro -un menor de 17 años- se cayó y golpeó su cabeza contra el cordón de la calle, por lo que debió ser asistido.

"La gente se alteró y un móvil de la comisaría Tercera fue recibido con pedradas y terminó con los vidrios rotos", agregó.