EL BOLSÓN. (AEB).- Pobladores del sector alto de Mallín Ahogado se manifestaron ayer frente al municipio y pidieron ser recibidos por el intendente por un problema de tierras que catalogaron como "una usurpación de la chacra que comparten Susana Parodi y los hermanos Quisle".
Los hechos se precipitaron en los últimos días del año pasado y motivaron incluso la visita al lugar del juez Ricardo Calcagno, quien dijo al retirarse que debía "evaluar las pruebas presentadas por la partes".
La vecina afectada dijo haberse sorprendido con carteles que decían "territorio mapuche" y "familia Avilés-Huenchupán". Según los manifestantes que acompañaron en la movilización a Parodi y Quisle, están "aterrorizados porque también han bloqueado el camino de acceso, prenden fuego en el bosque, armaron carpas y existen testigos de agresiones físicas y verbales contra los vecinos".
En consecuencia, mandaron una nota al magistrado de Bariloche haciéndole saber su "pesar por los hechos de violencia que alteran nuestras vidas y afectan nuestros derechos a la libertad a la seguridad familiar".
En otra reunión, los mismos pobladores declararon "personas no gratas en el paraje a los representantes de la usurpación violenta", a los que identificaron "como Elías y Daniel Avilés".
La respuesta no se hizo esperar. Elías Avilés dijo que "mi vieja vendió esa propiedad hace 28 años, pero la habían estafado. Son tierras ancestrales, allí vivieron mis abuelos y mis padres". "Quisle nos conoce desde siempre y en ningún momento se le faltó el respeto. Si yo le hubiera pegado tendría que haber ido al hospital o hacer la denuncia. Lo que pasa es que lo manipula esa señora (por Susana Parodi), que está acostumbrada a hacer piquetes y cortes de ruta", dijo.
El hombre acusado explicó enseguida que el campo luego "fue vendido por un tercero y en el ´91 se le hizo un juicio a Baratero, que estafó a mi mamá, quien ahora esta viviendo en una toma en Cipolletti. Incluso Quisle fue testigo a su favor".