Todos los días la fila de más de una cuadra puede verse salir desde la puerta de la oficina del Registro Nacional de Personas (Renaper) en el microcentro porteño. Cada uno de ellos busca obtener, como establece la ley, su Documento Nacional de Identidad (DNI). Pero el tema no es tan sencillo: si tienen la paciencia de hacer la cola y de realizar todo el trámite, deberán esperar al menos un año para que llegue el documento a sus manos.
Es que el Renaper está colapsado y no puede satisfacer la demanda de los ciudadanos, pese a que este es un año electoral.
Es que según declaró al diario Clarín Mora Arqueta, directora de ese organismo, el sistema "para un país de 15 millones de habitantes podía funcionar, pero ahora estamos casi en cuarenta, colapsó".
Además, advierten que llamar a la línea habilitada por el Ministerio del Interior para reclamos tampoco sirve de nada, porque le da constantemente ocupado.
"Me dieron que en tres meses mi documento iba a estar listo; ahora tuve que venirme hasta Buenos Aires para ver si lo puedo acelerar", relató Federico Blanco, un joven docente de 28 años que comenzó a tramitarlo a principios de 2008 en San Nicolás.
Si bien en el país hay 3.300 oficinas para gestionar el DNI, la confección se realiza únicamente en la sede central del Renaper.