NEUQUÉN (AN).- El ministro de Seguridad, Omar Pérez, anunció que "no se han definidos los ascensos en la Policía". De esta forma puso en dudas la situación del comisario Juan Carlos Escobar, quien a fines del año pasado le incautaron en Chos Malal 32 chivitos que transportaba en forma irregular en una camioneta oficial.

Escobar, segundo en la división de Asuntos Internos, fue propuesto por la superioridad para ser ascendido de comisario inspector a comisario mayor. Enterado de dicha novedad, que generó mucho malestar dentro de la fuerza, el uniformado, que proviene de una tradicional familia de policías, presentó la solicitud de retiro el pasado 5 de enero antes de irse de vacaciones, apostando a jubilarse con el nuevo salario.

Lo que no tuvo en cuenta el comisario inspector, que cumple en marzo 30 años dentro de la fuerza por lo que se jubila con el cien por ciento del salario, es que el ministro de Seguridad y el gobernador Jorge Sapag todavía no habían firmado el decreto con los ascensos.

Pérez señaló en un comunicado que "la resolución ministerial que regula las vacantes para el ejercicio 2009 se encuentra en proceso de análisis y elaboración. El trámite no se encuentra culminado, por lo tanto, no se puede hablar de cantidad de vacantes y ascensos ya concretados dentro de la institución".

Se supo que tanto al ministro como al gobernador no les cayó para nada simpático el accionar de Escobar y querrían tomar una medida ejemplificadora, debido a que el uniformado era uno de los responsables de sancionar el accionar de sus pares.

El comisario, quien había sido comisionado a Chos Malal unos días antes de Navidad, adujo estar trayendo las reses a pedido de sus compañeros de trabajo y confesó que actuó mal al utilizar un bien público para beneficio personal.