NEUQUÉN (AN).- En menos de dos horas y media se quemaron cuatro casillas en el oeste capitalino. En la toma Bella Vista hubo dos incendios, un bombero herido y vecinos molestos apedrearon las autobombas. Fue una madrugada bastante movida para los efectivos de los cuarteles 2 de Gregorio Álvarez y 6 de Villa Hipódromo.
La actividad comenzó a la 1:32 cuando una casilla ardió en calle Magaldi y Abraham en Cordón Colón. El cuartel 2 intervino en el control del fuego pero no pudo evitar los daños totales de la precaria vivienda de doce metros cuadrados. No hubo lesionados y no se sabe cuales fueron las causas.
El segundo siniestro fue notificado pasadas las 2:30. Esta vez el fuego consumió una casilla en construcción de calle Abraham y Colón. Sólo se registraron daños materiales. Cerca de las 3:20, una casilla abandonada de la toma Bella Vista comenzó a arder, aparentemente en forma intencional, por lo que bomberos del Cuartel 2 y 6 debieron allegarse hasta el lugar. Cuando todavía no llegaban los bomberos, la intensidad de las llamas propagó el fuego a una casilla vecina donde por suerte los dueños se encontraban en el exterior.
Atravesando las llamas el cabo primero Maximiliano Serrano (31), hijo del director de Bomberos, ingresó para certificar que no hubiera nadie en el interior. En ese momento se produjo la explosión de una garrafa y la onda expansiva lo tiró al piso. Un compañero se encargó de retirarlo y posteriormente se lo trasladó al hospital Heller donde le practicaron distintos estudios de rutina y se determinó que Serrano no sufrió lesiones por lo que se le dio el alta.
El director de bomberos, Jorge Serrano, aclaró que "mi hijo estaba con toda la indumentaria de seguridad por lo que no le sucedió nada. La onda expansiva lo despidió y quedó aturdido".
En Bella Vista los vecinos se manifestaron molestos con bomberos por la demora que permitió que las llamas se propagaran. Controlado los siniestros una lluvia de piedras cayó sobre los efectivos que subieron a los camiones y se retiraron sin hacer las pericias. Volvieron por la mañana para remover escombros e intentar determinar las causas del incendio.
Desde Bomberos explicaron que por la precariedad de los materiales de las casillas (cantoneras y chapas) una vez que se inicia el fuego en menos de cinco minutos las viviendas quedan reducidas a cenizas. Muchas veces salen sabiendo que van a intentar evitar la propagación más que salvar la casilla afectada.
