Damián Dossena poco pudo disfrutar de la presente edición de la Regata. El del rosarino, uno de los esperados animadores en K1 séniors, fue el único abandono registrado entre los 81 botes que se pusieron en marcha en Neuquén.

Mientras que Adriel Kéding, ganador de las últimas dos ediciones en K1 máster, terminó el tramo muy retrasado al completar la última parte con el timón roto.

Los primeros kilómetros en la zona de balnearios y unos pocos pedreros fueron los escollos que tuvieron que superar los palistas. El intenso calor registrado en Neuquén a la hora de partida no se repitió en el resto del recorrido y la suave brisa fue una buena compañía para todos. Aunque no estuvieron claros los motivos, la competencia se quedó sin la presencia de los seis palistas chilenos que nunca llegaron a la capital neuquina.