SAN ANTONIO OESTE (ASA).- Los familiares de Silvia Manzanares, la taxista que fue hallada asesinada el sábado 3 en un camino vecinal ubicado a metros del basural municipal, convocaron a la comunidad a participar de una misa que iba a celebrarse ayer a las 21, en la iglesia Virgen de Luján, ubicada en la intersección de las calles Quintana y Santa Cruz de esta localidad, con la consigna de exigir un pronto esclarecimiento del hecho.
A poco más de una semana del hallazgo del cuerpo de la víctima, que estaba ubicado a 500 metros del taxi que manejaba, los pesquisas están centrándose ahora en ampliar los testimonios de ciertos testigos que consideran claves para dilucidar el hecho.
Uno de ellos es un camionero que se desempeña en una empresa de transportes cuyos vehículos transitan cotidianamente por el sendero vecinal en cuestión.
Pese a que en un primer momento se había descartado el rumor que hablaba de su existencia, altas fuentes policiales confirmaron que el hombre habría sido el primero en visualizar el cadáver, antes de que el llamado de un oficial de Prefectura alertara a la policía, a las 11:15 del sábado, acerca del hallazgo del cuerpo de la mujer.
Después de esa primer alerta, los oficiales recibieron la llamada del dueño de la firma local para la que trabaja el camionero, que manifestó que su empleado le había referido que había visto en el camino cercano al basural un cuerpo sin vida.
Sin embargo, como el conductor de ese camión pasó momentos antes de que el chofer de una empresa de transporte local que atravesaba la ruta 3 viera cruzar raudamente a un joven abandonando el lugar del hecho, se especula que el camionero vio algo más de lo que detalló en su declaración, en la que sólo menciona haber visualizado el cadáver de la mujer.
El otro testimonio clave es el de un comerciante que posee un local en la esquina próxima a la parada en la que la taxista.