NEUQUÉN (AN).- Luego de un 2008 más que favorable, el músico neuquino Agustín Queipo comienza el nuevo año sembrando poesía en formato de trova por cuanto rincón esté deshabitado. Hoy a la medianoche, se subirá al escenario de Arpillera para presentar las canciones de su disco "Hecha la luz, hecha la sombra" y del DVD "Verbovivir".
"Prefiero ser quien escribe, antes de ser cartero", "Escribo sin bretel que me sujete el impulso combustible de la espina", canta el trovador neuquino. Y es así como desde hace años se dedica a la trova latinoamericana con sabor a Patagonia. Sus primeros pasos por el sendero del arte, fueron a los once años en talleres literarios. Luego, cuando sus poesías comenzaron a acumularse en el escritorio, Agustín tomó una guitarra para ponerles música. Influenciado por la música que de niño se escuchaba en su hogar, como por ejemplo Silvio Rodríguez, se dejó fascinar por la trova latinoamericana y ése fue el principio de un largo camino. Camino que lo llevó a recorrer su país con su primer compilado de canciones amateur, "Estuche", y posteriormente armar maletas para conquistar con éxito los públicos de Chile, Venezuela, México y Brasil.
Tiene editado su primer disco "Hecha la luz, hecha la sombra", un DVD "Verbovivir" y este año lanzará su tercer trabajo "Alma y Victoria", material que si bien respetará la estética de la trova argentina, tendrá ingredientes novedosos propios del natural crecimiento del artista. De espíritu inquieto, no descansó hasta que logró que uno de sus videos fuera emitido por Televisión Nacional de Chile, como un primer paso para que Latinoamérica conozca su trabajo.
Hoy, con veintitantos años y con el reconocimiento de público y productores musicales, el trovador neuquino confiesa que nunca fue un atleta de la música ni del canto. "Creo más en la pasión y en la emoción", frase que a modo de amuleto utiliza para escribir cada una de sus canciones, porque entiende que la trova es eso precisamente: transmitir el sentir de los pueblos desde la emoción que surge de las entrañas, como un lenguaje único que sea entendido por todos, en todas partes del mundo.
Abrazado a su guitarra, Agustín tiene por costumbre darse el gusto de hacer subir al escenario a músicos amigos, entre ellos Ricardo Gutiérrez con su guitarra, la percusión de Gally Adaro y Marcos Saez y su bajo. En el recital que brindará esta noche, el escenario estará también a disposición de cuanto músico quiera sumarse a la propuesta con sus canciones.