VIEDMA (AV).- La Policía de Río Negro debió poner en juego toda la infraestructura de seguridad disponible en El Cóndor, en el marco de los operativos de control, a fin de detener la enloquecida carrera de un joven y sus amigos al mando de una 4x4. Cuando lograron apresarlos, sólo se les labró una contravención.
Los nerviosos momentos se registraron en las primeras horas del sábado pasado cuando los jóvenes decidió divertirse de una manera más audaz, ya que habían cerrado los "boliches". Un control advirtió las peligrosas y veloces maniobras tanto en las zonas de playa como las calles del balneario; mezclándose entre la gente que suele aprovechar algunas actividades veraniegas durante las primeras horas del día.
El conductor del rodado sería oriundo de Trelew. Fue perseguido por espacio de 20 minutos entre las estrechas calles hasta que un patrullero conducido por el subcomisario Gustavo Cuevas lo interceptó en la ruta N°1, a la altura del Faro Río Negro.
Por momentos se trepó a algunas veredas para sortear a los vehículos policiales y sobre la calle 69 -de ingreso a la villa- estuvo a punto de chocar otro móvil policial que había sido estacionado estratégicamente para que deponga su beligerante actitud.
También se lo vio pasar a alta velocidad por la calle de la terminal, atestada de gente en ese momento que esperaba un colectivo para retornar a Viedma, tras el lanzamiento de la "movida" nocturna en el sector costanero.
La actitud evasiva no impidió posteriormente que los mecanismos de control implementados por la fuerza e inspectores municipales pudieran certificar que el joven y dos amigos estaban ebrios.