WASHINGTON.- El político hispano Bill Richardson, gobernador de Nuevo México y quien hace un mes fue nominado por el presidente electo de Estados Unidos Barack Obama como su próximo secretario de Comercio, anunció ayer que rechazó la nominación en medio de averiguaciones de un jurado de investigación.
El jurado federal investiga cómo fue que una compañía de California que contribuyó con las actividades políticas de Richardson ganó un contrato estatal en Nuevo México por más de un millón de dólares.
Richardson es uno de los hispanos más prominentes en el Partido Demócrata, después de haber trabajado en el Congreso y como embajador del presidente Bill Clinton ante Naciones Unidas y como secretario de Energía.
Como gobernador ha mantenido un perfil internacional alto, especialmente cuando se trata de negociar con naciones difíciles. Obama también contempló a Richardson para el cargo de secretario de Estado.
El presidente electo, que toma el poder el 20 de enero, dijo en un comunicado que aceptó el retiro de Richardson "con gran pesar´´.
Agregó que el gobernador estaba poniendo primero a la nación para evitar cualquier retraso en la designación de quien ocupe el cargo ministerial.
En una declaración emitida por la oficina de transición de Obama, Richardson señaló que la investigación pudiera tomar semanas o meses y que él no podía pedirle a Obama que retrasara el trabajo del Departamento de Comercio. Richardson afirmó que la investigación mostrará que él "actuó propiamente´´ en todos los terrenos.
"Dada la gravedad de la situación económica que está enfrentando la nación, no podía con la conciencia tranquila pedirle al presidente electo y su gobierno postergar ni un día el trabajo importante que necesita hacerse´´, agregó Richardson.
El gobernador dijo que él permanecerá como gobernador. Le dijo a Obama: "Estoy ávido de trabajar en el futuro en cualquier forma que él juzgue útil´´.
El anuncio fue hecho antes de reuniones programadas para hoy entre Obama y líderes del Congreso sobre una iniciativa de recuperación económica masiva que él desea que los legisladores aprueben rápidamente.
"Aunque debemos movernos rápidamente para llenar el vacío dejado por la decisión del gobernador Richardson, espero su servicio futuro para nuestro país y en mi administración´´, agregó Obama en el comunicado.
Una persona familiarizada con los procedimientos dijo que el jurado de procedencia investiga la posible existencia de relaciones impropias entre la empresa CDR Financial Products y alguien en un cargo estatal en Nuevo México para aceptar el contrato.
Documentos estatales muestran que el estado de Nuevo México pagó a CDR un total de 1.480 millones de dólares en el 2004 y el 2005 por trabajos en un programa de transporte.
Richardson, hijo de mexicana y estadounidense, criado en México y perfecto bilingüe inglés-español, es el único gobernador con orígenes hispanos.
De 61 años, es un veterano del Partido Demócrata, fue secretario de Energía durante la presidencia de Bill Clinton (1993-2001), embajador ante la ONU y un hábil negociador ante regímenes enemigos para obtener la liberación de prisioneros estadounidenses.