Orlando Terranova se preparó como pocos para ser local en el Rally Dakar. En la previa eran muchos los que especulaban con las posibilidades de uno de los pilotos del equipo BMW. Ayer, el mendocino demostró que está para pelear con los mejores con su séptimo lugar en la general de autos y y de no haber sido por un problema de navegación hasta pudo terminar más adelante.

Terranova estuvo prendido en la lucha por la punta de movida y hasta promediando el especial de velocidad se mantuvo entre los cuatro mejores.

En el primer control estaba tercero, a 25 segundos de Nasser Al Attihay, mientras que en el segundo bajaba al cuarto, a 1m 1s del sorprendente Guerlain Chichiret, pero siempre adelante de los afamados Stephane Peter-hansel, Carlos Sainz y Luc Alphand, entre otros.

En el tercer control mantuvo el cuarto lugar, a menos de dos minutos de la punta, hasta que aparecieron los problemas de navegación en el GPS que lo dejaron séptimo, a 5m 09s del líder.

Si la BMW responde a la exigencia, seguro que Terranova podrá seguir prendido en la lucha por la punta. Recién pasó el primer examen, pero fue realmente muy bueno lo que produjo "Orly", quien empezó a hacer historia en el Dakar.

El otro argentino de nivel es el cordobés Gabriel Pozzo, quien al comando de una Mitsubishi que le armó el Tango Rally Team fue de menor a mayor, terminando en el lugar cincuenta de la clasificación general, a 43m 50s de Al Attiyah.

Pozzo siempre estuvo entre los sesenta mejores, pero pegó un salto en la general en la última parte de velocidad.

Los otros argentinos también llegaron. Jorge Murano quedó 111, mientras que Patxi Otaño finalizó 154.