CIPOLLETTI (AC).- Estaba escondido a pocos metros de dónde ocurrió el hecho. Intentó darse a la fuga, pero el accionar de la policía se lo impidió. A última hora del primer día del año, el presunto autor del homicidio de Pablo Palacios en un inquilinato de Pichi Nahuel, logró ser detenido.

El hombre de 47 años es conocido en el ambiente delictivo de la ciudad y habría ido al domicilio de la víctima a participar de los festejos de Año Nuevo. Una discusión produjo el desenlace fatal.

La detención se produjo el mismo jueves a las 22.45, en América al 200. Hasta allí llegó la policía y la Justicia. Cuando los efectivos iniciaron el allanamiento, quiso darse a la fuga, lo que produjo forcejeos y disparos al aire. Sin embargo, no pudo escapar.

Los investigadores tienen fuertes sospechas de que el detenido habría sido quien le asestó a Palacios (23) la puñalada mortal.

El homicidio ocurrió después de las 18 en la vereda del inquilinato ubicado en Sucre a pocos metros de América del barrio Pichi Nahuel. Según los testimonios que aportaron a este diario los vecinos, víctima y victimario habrían salido del lugar discutiendo mientras una mujer intentaba separarlos.

"¿Qué me vas a hacer con ese cortaplumas?", le habría preguntado Palacios al agresor esquivando el primer puntazo. Ya en la esquina, el segundo fue fatal y el joven cayó herido de muerte. Cuando era trasladado al hospital local, falleció.

A poco de tomar conocimiento del hecho, la policía llegó al lugar y comenzó con las actuaciones. La rapidez del procedimiento permitió primero demorar a tres testigos presenciales, dos hombres y una mujer, para tomarles declaración. Sus testimonios habrían sido determinantes a la hora de detener al presunto homicida.

El detenido vivía a pocos metros del lugar y hasta allí fue a refugiarse luego de la pelea que terminó con la vida de Palacios. Una certera puñalada en la zona abdominal fue la causa de la muerte.

Ayer le realizaron la autopsia y se finalizaban las diligencias para entregar el cuerpo a la familia.

El subcomisario Jorge Carrizo, de la unidad Cuarta, destacó la importancia del trabajo conjunto entre los efectivos, la Brigada de Investigaciones y la Justicia, que permitió -en pocas horas- dar con el presunto homicida. El arma, que sería una faca (arma blanca casera), aún no pudo ser hallada a pesar de los intensos rastrillajes que se montaron en varias cuadras a la redonda.