El consultor político, Jaime Durán Barba, asesor del jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri, señaló que salvo este último el resto de la oposición y los Kirchner son parte una generación política que "caducó".
El politólogo ecuatoriano sostuvo que la elección parlamentaria de este año está "hipervalorada" y no tendrá la relevancia que se le adjudica de cara a las presidenciales del 2011, dado que el antikirchnerismo irá dividido.
En relación al peronismo disidente, consideró que es muy difícil derrotar a la presidenta desde ese partido. Y desafiante agregó: "Hay que ver si la sociedad se anima a votar a otro justicialista para gobernar".
-¿En qué escenario político se cerró el 2008?
-A partir del conflicto con los ruralistas se registró una caída pronunciada del gobierno de Cristina Fernández evidenciada en todas las mediciones.
-¿La pelea con el campo fue el hecho crucial del año pasado?
-Mi impresión es que hay poco diálogo del Poder Ejecutivo no sólo con los sectores políticos sino también productivos y sociales cuando la crisis mundial impone que los países latinoamericanos tengamos una gran comunicación. A los Kirchner les falta más flexibilidad para que los argentinos paguen lo menos posible la crisis.
-¿Qué países de la región son esenciales en esta dinámica?
-Brasil desde luego, pero hay otros que también están adelante de la Argentina en cuanto a inversión y crecimiento económico: México, Chile, Perú, Colombia que más allá de la eventual inclinación a la derecha o a la izquierda coinciden en las líneas principales: reglas de juego claras e inversión privada como clave del desarrollo, en algunos casos con mayor inclinación hacia lo social que en otros, pero en todos los ejemplos citados la democracia está funcionando si entendemos por ello separación de poderes y respeto a la oposición.
-¿Por qué no incluye a la Argentina en este grupo?
-Diría que la Argentina es un caso intermedio entre los regímenes democráticos, y los "chavistas" - como Venezuela, Nicaragua y Ecuador- que están en las antípodas.
-¿Cuánto de la crisis interna tiene que ver con la debacle mundial?
-Si hubiésemos aprovechado (n de la r: el entrevistado pasa mucho tiempo en nuestro país y suele hablar como un argentino) el auge brutal que tuvo el agro, la prosperidad sería muy grande. Es increíble como a veces los beneficios se desperdician, caso de Venezuela y Ecuador que tuvieron la bonanza del petróleo. En cambio Chile, México y Perú realizaron una política de ahorro que hoy los tiene mejor parados.
-Desde que el kirchenirsmo está en el poder la oposición no parece capaz de generar una real alternativa.
-Falta mucho para las elecciones presidenciales como para inquietarse por la sucesión de Cristina Fernández. Por otro lado, en América Latina caducó toda una generación política. Correa llegó al poder porque feneció la clase política ecuatoriana, lo
mismo Chávez en Venezuela, incluso -por otros motivos- Obama significa el fin de una época. En la Argentina también hay una generación política que se acabó.
-¿A quiénes se refiere?
-A los políticos que nacieron sin televisión, que no manejan internet, que siguen creyendo en izquierda y derecha, así como los que creen que el peronismo es un eje de la vida cotidiana de los argentinos. Es una caducidad que abarca a los Kirchner, pasando por Lavagna, Carrió y López Muphy.Tienen que surgir nuevos líderes.
-¿Y Hermes Binner?
-Es un referente importante de la oposición, pero su estilo no es el de la nueva política.
-¿En quiénes piensa cuando describe al político moderno?
-Macri es el único dirigente que asoma en esta nueva generación, el único que se comunica al estilo Obama. Piense que el "Yes We Can" (lema de campaña del presidente electo de EE. UU) pasó por You Toube, no por la tevé y que atrajo la mayor cantidad de jóvenes que nunca votó en semejante proporción en Estados Unidos. La nueva política que supera sus propios paradigmas.
-Más que de una nueva política Ud. parece estar hablando de comunicación.
-La ciencia política está igual que la escolástica después del Concilio Vaticano II, hay que pensar la política desde afuera de la ciencia política, fuera de la lógica de los partidos... Sólo a un 20% -casi todos ellos mayores de edad y con alta formación intelectual- le interesa si un candidato es de izquierda o derecha, peronista o no.
-Sin embargo, muchos analistas sostienen que Carrió se corrió a la derecha y le disputa a Macri el liderazgo de ese sector.
-Son esquemas falsos, pensar que Evo Morales es de izquierda me parece una chifladura, es un fascista indígena que quiere reconstruir el Tiguantinsuyo.
-De modo que discrepa con Torcuato Di Tella quien considera al kirchnerismo y al peronismo actual de izquierda; y al radicalismo y macrismo de derecha.
-Torcuato es creativo y es uno de los grandes autores sobre la clase obrera argentina, pero esas categorías habría que repensarlas. (Hugo) Chávez, (Rafael) Correa, (Daniel) Ortega... ¿con quién están aliados a nivel mundial? Con el régimen de Irán manejado por sacerdotes, antisemita, que avasalla los derechos de las mujeres y homosexuales, un régimen absolutamente oscurantista que estaría a la extrema derecha del mundo, un sistema troglodita.
-Pese a ser aliado de Chávez, el kirchnerismo no parece en la misma órbita que Chávez y Correa, ¿o no es así?
-Es estatista, en algunas cosas recupera doctrinas setentistas; pero insisto: la nueva visión progresista tiene que ver más con los derechos individuales respeto a la diversidad racial, sexual, a la ecología; mientras la gente de derecha está más anclada en mitos sobre el aborto e ideas más reaccionarias. En mi caso adherí al llamado progresismo pero apenas cayó el muro de Berlín fui a ver cómo estaban las dos alemanias. Pese a ser la misma gente, la misma raza, etc. de un lado había un país subdesarrollado y miserable (Alemania Oriental) y del otro uno de los más desarrollados (Alemania Federal); lo mismo en Corea del Norte donde la gente se muere de hambre en las calles, mientras Corea del Sur es un territorio muy próspero. ¿Cuál es la diferencia? El régimen político.
-Hay otros políticos aparte de Macri en la sintonía que Ud. describe?
-De a poco van a ir apareciendo, creo que el viejo discurso murió y hay que aprender con modestia de la forma de comunicación de los jóvenes para comprender la nueva sociedad.
-¿Macri estaría más cerca de un Obama en ese ítem?
-Definitivamente, sus campañas del 2005 y 2007 estuvieron orientadas por esa forma diversa de hacer política.
-¿Cree que la sociedad le renovará la confianza a Macri tras su gestión en el Ejecutivo porteño?
-Estamos en un primer año, se está haciendo mucha obra en la Capital Federal, el tema del reordenamiento de los cartoneros será un éxito. Veo un Macri muy entusiasmado, con ganas de trabajar, con gente capaz como Gabriela Michetti y un equipo de gobierno muy nuevo sin experiencia política que no tiene las mañas, ni -también es cierto- los conocimientos de los políticos, ha sido un año de aprendizaje, de empezar a navegar en un mundo desconocido.
-¿Aún cuando cerca de él haya quienes venían de actuar en varios gobiernos como (Horacio) Rodríguez Larreta, (Diego) Santilli, (Cristian) Ritondo y otros?
-Pero Rodríguez Larreta no tuvo cargos centrales en el pasado. Los que Ud. nombró no son Coti Nosiglia, ni Duhalde, ni Carrió ni López Murphy.
¿MACRI A PRESIDENTE?
-¿Macri no tiene que empezar a mover las piezas para aspirar a la presidencia en el 2011?
-Un político tiene que ser honesto con sus electores. A la larga, la nueva política también tiene que ver con esto. ¿La gente quiere de Macri que se dedique ahora a disputar con Cristina Kirchner? No, sino que cumpla con las tres cosas que ofrecimos en campaña: empleo, salud y seguridad, tenemos que transformar la ciudad de Buenos Aires lograr que, como en otro momento, sea la ciudad más hermosa de América Latina.
-¿Cómo repercutirá el argumento de que no puede cumplir con algunas promesas por las trabas del gobierno nacional?
-Si el gobierno federal tuviera una postura de apertura y juntos hicieran cosas por Buenos Aires a ambos les vendría bien, esa bronca no le conviene a nadie.
-¿El gobierno vislumbra a Macri como el principal opositor?
-Lo ven más enemigo de lo que es, junto con Santiago (nieto, su socio) vemos a Macri con enorme frecuencia y del 100% del tiempo le aseguro que solo el 2% lo dedicamos a hablar del gobierno nacional. Conversamos acerca de qué hacemos con el Maldonado, con las inundaciones, con la seguridad y el transporte.
-¿Cuán importante va a ser la elección de medio término de cara al 2011?
-En América Latina dos años es un siglo, nuestros países son cortoplacistas. Hace un año la imagen de los Kirchner era espectacular, ahora están en la fosa. En un año quién sabe. La elección parlamentaria está hipervalorada por los políticos que creen que la gente vive de la política. Además, en octubre la oposición irá dividida como para hacer demasiadas proyecciones.
-Pero lo que decida la gente tendrá un efecto político.
-Si la crisis se agudiza y aumenta el desempleo el gobierno va a tener serios problemas, lo demás poco importa.
-¿No sería una señal que el gobierno reciba un castigo electoral?
-¿Qué porcentaje de la gente cuando la consulta está preocupada ahora por castigar al gobierno? La principal preocupación es la inflación, el empleo, lo otro es problema de los editorialistas, los políticos. Del mundo de los intelectuales a la gente común hay un abismo como de la tierra a la luna.
-¿En qué momento debería definir Macri su estrategia nacional?
-Todo tiene etapas en la vida. Si cumple haciendo una gestión que la gente aprecia le puede pasar lo de Jamil Mahuad (de alcalde de Quito saltó a la presidencia de Ecuador) o lo de López Obrador (jefe de Gobierno de la capital mexicana que estuvo a un paso de ser presidente mexicano). Cuando hay una buena gestión la gente pide que siga para adelante, si no no sirve de nada.
-¿Cómo observa a Lavagna y a Carrió?
-Creo que tocaron techo. Lavagna ya experimentó un paso por el gobierno; Carrió es combativa pero su credibilidad no está bien. En cuanto a (Julio) Cobos yo vi varios fenómenos en Argentina como (Juan Carlos) Blumberg que podía ser intendente, gobernador o Papa; hay que esperar si Cobos se asienta o es un fuego fugaz. José Velasco Ibarra (cinco veces presidente de Ecuador) espetaba que "el vicepresidente, en nuestros países, es el único conspirador a sueldo del Estado" -por lo que no es un caso inédito que pase a la oposición-.
Ese sector también tiene el problema de hasta qué punto Lilita es flexible en las alianzas. Sobre Felipe Solá habrá que ver la fuerza del peronismo disidente, pues creo que la mayoría de ese movimiento está con Kirchner. El PJ es un partido que históricamente tiende a estar en el poder, sin espacio afuera. Y por último queda preguntarse si la sociedad volvería a elegir a un peronista después de este gobierno.
-¿Al gobernador bonaerense, Daniel Scioli, lo ve definitivamente en ese sector?
-Está en el oficialismo y supongo que será su candidato si Néstor Kirchner no se postula.
-En su concepción, entonces, ¿Macri no necesita de la llamada "pata peronista"?
-A esta altura el peronismo es una especie de religión parecido al gualadupismo mexicano (adoración de la virgen de aquel país). Hay de izquierda, de derecha, pero el movimiento sindical que estructuró ese movimiento es ahora algo lateral.
-¿Los partidos políticos están desapareciendo?
-Han perdido la influencia todas las entidades intermedias. El sindicalismo, los partidos, la iglesia, las cámaras empresarias; vivimos en una sociedad individualista en la que los electores quieren vincularse directamente con los líderes, sin intermediación. Le doy un dato: no hay ningún partido durable que haya aparecido en América Latina en los últimos 30 años; por el contrario hay muchos que se extinguieron, como el COPEI en Venezuela; para los peruanos porque el APRA ya no es el de Haya de la Torre... En Chile desde que se expiró el fenómeno Pinochet hay una coalición que va de comunistas a conservadores. Quedan sólo "carcasas electorales" como el PRI y el PAN en México o el PJ, son sólo aparatos de poder.
-¿Eso es mejor o peor?
-No hay mejores o peores; hay mundos distintos. Yo nací en una familia feudal ecuatoriana viví muy feliz dentro de sus normas, con mi padre tenía la distancias de las familias de antes, pero sería idiota si quisiese que mis nietos tuviesen esa relación conmigo. Cuando les llamo la atención me contestan: "Abuelo, los niños tenemos derechos", mi padre me hubiera botado por la ventana. ¿Es mejor o peor? Como dicen los chicos: nada.
POR CLAUDIO RABINOVITCH