CENTENARIO (ACE).- El Deliberante de Centenario abrió nuevamente la polémica sobre el avance de la urbanización en el sector de chacras cuando autorizó un loteo de 170 terrenos a la vera del Neuquén, en las cercanías de predios en producción en Villa Obrera.
Los ediles aprobaron en primera vuelta la inversión el 15 de diciembre pasado. En febrero se deberá realizar la audiencia pública donde se ventilarán los pro y contras de la inversión privada de una empresaria de Cipolletti.
La audiencia pública no es vinculante, pero la última que se hizo para tratar la urbanización de una chacra pegada al Casco Viejo de Centenario, generó tal polémica y férreo rechazo del sector productivo y empresario, que los concejales dieron marcha atrás con su idea de autorizar el loteo, que era de otro privado. Los detalles fueron dados a conocer por el concejal (UCR) Daniel Egea, quien desde el lunes asumirá la presidencia del Concejo Deliberante durante la licencia del intendente, Javier Bertoldi.
Son siete hectáreas ubicadas detrás del puesto policial de la caminera de Villa Obrera (fracción 45 R3, pegado al puente Centenario - Cinco Saltos), que fue vendido a inversores de Cipolletti.
Mónica Romina Rodríguez solicitó al Concejo vender lotes como parte de un proyecto inmobiliario. Como es zona de producción frutícola, el Deliberante sólo puede autorizar por vía excepcional.
"La aprobación en primera vuelta habilitó el tratamiento del expediente, a partir del 15 de febrero son 30 días para llamar a la audiencia pública donde el inversor debe presentar el loteo, las reservas para espacio verde, y el estudio de impacto ambiental, que está hecho", dijo Egea. Los concejales solicitaron informes a la AIC y a Recursos Hídricos debido a la cercanía con el río Neuquén. La franja que se pide subdividir está ubicada entre el desagüe que lleva el exceso de agua de los canales al río y un brazo del Neuquén, y al menos la zona de ingreso de lo que sería el futuro barrio, se anegó en las últimas crecidas extraordinarias.
Pero según dijo el concejal Egea los informes técnicos dicen que la zona no es inundable. Uno de los problemas de una urbanización de más 150 casas en esa zona ribereña es que no hay cloacas y el ducto principal que va a la planta está a unos 4 kilómetros del lugar. "La ex estación de gas que está dentro del predio sería uno de los ingresos al barrio; se pretende que el inversor incluya las cloacas", dijo Egea.