CHIMPAY (AVM).- Las altas temperaturas, lo tupido del monte, pero principalmente el viento que se levantó durante la noche del domingo y continuaba ayer, avivaron el fuego que ya lleva consumidas cerca de tres mil hectáreas de pasto natural. Luego del trabajo realizado en conjunto entre los bomberos chimpayenses, personal de los establecimientos cercanos y maquinaria municipal, que casi acabaron con el incendio del sábado a la tarde, el viento del domingo alimentó las llamas que cruzaron la Ruta 22 en el kilómetro 1.057 -a once kilómetros de Chimpay rumbo al Alto Valle- para acabar con quinientas hectáreas de monte tupido.

"Desde el río Negro hasta la Ruta 22, entre los dos establecimientos pertenencientes a la firma Expofrut se había prendido fuego, hoy (por ayer) tuvimos el inconveniente que el viento se dio vuelta y comenzó a quemar hacia atrás y ponía en peligro un caserío de una chacra, por eso pedimos la motoniveladora al municipio para cuidar el lugar donde se hará un contrafuego", aseguró Néstor García, jefe de los bomberos de Choele Choel y uno de los responsables en el lugar. Agregó que "no va para el lado de los galpones, sí se quiere contener para que no vaya hacia donde están las casas". Cerca de las 18 del domingo, sorpresivamente el fuego "saltó" la ruta por el margen norte de la traza quemando 700 hectáreas en el kilómetro 1.057.