Cuando las instancias de negociaciones parecían agotadas, tras la falta de acuerdo en la reunión llevada a cabo en el Ministerio de Planificación entre las principales petroleras y el gremio del sector se resolvió dar una tregua al conflicto hasta mediados de enero.
Ése fue el resultado de un encuentro multisectorial mantenido en la tarde de ayer, donde se dispuso no aplicar la medida de fuerza de 48 horas prevista para los últimos días del año.
La noticia llevó alivio a todas aquellas personas que tienen previsto viajar en las próximas horas, ya sea para visitar familiares por la fiesta de Año Nuevo o por el inicio de las vacaciones.
Los empresarios de estaciones reclaman al gobierno y a las petroleras el incremento de la bonificación por litro de combustible vendido. Por otra parte, los sindicatos del sector piden una recomposición salarial del 15%, algo que los empresarios consideran imposible sin incrementos de precios o bajas impositivas.
Previo al encuentro, empresarios y trabajadores se quejaban de la propuesta del gobierno, que Manuel García, titular de la Asociación de Estaciones de Servicio Independientes (AESI), calificó de "mezquina". Luego anunció ante las cámaras de tevé que se descartaba la medida, horas antes inminente: "Las bonificaciones y la rentabilidad están estancadas, pero los usuarios no tienen injerencia en la crisis terminal que está soportando el sector. Esto es responsabilidad del gobierno y de las petroleras", dijo. Eso, aclaró, forma parte de una tregua hasta mediados de enero que podría extenderse hasta fin de mes para intentar consensuar.
García cree que la propuesta oficial "no satisface la rentabilidad y las exigencias del negocio" y por eso advierte que "el plan de lucha sigue en pie".
Lo que reclama, en concreto, es incrementar la rentabilidad del 8 al 15% en la venta por litro de combustible. La propuesta que el gobierno les hizo en los últimos días a los propietarios de las estaciones fue un aumento de 10 centavos por litro para mejorar la rentabilidad. Ellos lo rechazan porque dicen que, si se les restan impuestos y aportes patronales, quedan sólo dos centavos para los dueños de los surtidores.
En la conferencia para anunciar la decisión del Gobierno de designar un veedor en Transportadora de Gas del Norte, Julio De Vido fue consultado a primera hora sobre las gestiones para frenar un nuevo paro.
El funcionario evitó dar precisiones. "Este ministerio ha buscado acercar posiciones, buscar un acuerdo amigable que devuelva márgenes operativos a los estacioneros que les permitan cumplir con sus obligaciones con los trabajadores, buscar una salida para que (los empleados) puedan ser remunerados y para que la empresa recupere rentabilidad. Estamos negociando y cualquier opinión de mi parte podría entorpecer el proceso", afirmó. "La presidenta dio la orden de que no quieren paro", dijo ayer Rosario Sica, presidenta de Fecra. "Nosotros pedimos que bajen los impuestos, pero para este gobierno primero va la caja del Estado y después el bolsillo del consumidor. No queremos más estaciones cerradas", estimó.
En cambio, el secretario de la AESI, Eduardo Bajlec, afirmó que si las refinerías bajaran "dos dólares" el precio interno de venta del barril de petróleo, se podría "duplicar la rentabilidad" de las estaciones de servicios. "Con el valor del barril de petróleo crudo a 36 dólares a nivel mundial, no hay razón para mantenerlo en 42 dólares en la Argentina", indicó. Así subrayó que "si las refinerías bajan de 42 a 40 dólares el precio interno, con esos 2 dólares alcanza para duplicar la rentabilidad". (DyN/R.Central)
