La semana que pasó, el fiscal federal Gerardo Pollicita produjo un cimbronazo al poder kirchnerista cuando consideró que existían elementos suficientes para investigar al ex presidente Néstor Kirchner como supuesto jefe de una asociación ilícita.

La investigación involucra, además de Kirchner, a los funcionarios Carlos Alberto Zannini, Julio Miguel De Vido y Ricardo Jaime, al ex titular del Occovi, Claudio Uberti, y a los empresarios "amigos" del poder Lázaro Báez, Rudy Ulloa Igor y Cristóbal López. Ellos serían los integrantes de la supuesta asociación ilícita que se habría beneficiado del erario público, según el dictamen. Pollicita se apoya en la denuncia efectuada por la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió.

El diario "Perfil" publicó ayer una nota en la describe la historia de Pollicita en sus pasos por la Justicia y brinda también algunos datos de su personalidad.

Mencionó que en los 15 años que lleva en la Justicia participó de varios casos resonantes. "Al ex rector de la UBA Oscar Shuberoff lo investigó por abuso de autoridad. Indagó en el patrimonio del ex ministro de la Corte, Eduardo Moliné O´Connor. Embistió contra los ex presidentes Menem y De la Rúa. Y pidió la indagatoria del ex vicepresidente Ruckauf, por el presunto delito de peculado. En definitiva, se trata de un hombre acostumbrado a hurgar en los archivos del poder", sostiene la nota.

De acuerdo con la investigación realizada por Perfil, Pollicita empezó a caminar los pasillos judiciales en la década del ´80. Fue secretario del fiscal Raúl Plee, en la Cámara de Casación Penal bonaerense. Integró el fuero federal en la provincia y más tarde regresó a la Capital. Fue fiscal adjunto de Stornelli y en el 2005 lo nombraron a cargo de la Fiscalía Federal número 11.

Pollicita es porteño, está casado y tiene tres hijos. Su lugar de residencia es el barrio de Barracas. "Tanto él como Ercolini (el juez que inició la causa) van a hacer todo lo que esté a su alcance", confió al diario porteño un juez federal. Entre otras cosas, el fiscal pide investigar las concesiones de la obra pública, las áreas petroleras y los juegos de azar efectuadas por el kirchnerismo. Supuestamente, en estos tres rubros se beneficiaría a un grupo reducido de empresas con la presunta connivencia del gobierno.

El viernes el juez Ercolini dijo que la causa está en etapa preliminar y que en la primera fase no habrá detenciones, sino que se juntarán pruebas. Ya dispuso unas quince medidas, entre las cuales se incluye la citación como testigo del ex intendente de Córdoba, Luis Juez, para que explique -tal como lo hizo públicamente- si recibió presiones del empresario Cristóbal López para apoyar el negocio del juego en la capital mediterránea.

También pidió llamar a declarar al ex embajador de Venezuela Roger Capela, quien había sido retirado por Chávez de su puesto, en medio de versiones que indicaban que había sido Kirchner quien le había pedido ese retiro. (Fuente: Perfil)