Domingo 28 de Diciembre de 2008 Edicion impresa pag. 12 > Regionales
El puesto sanitario de Pomona suma quejas por la atención
Malestar por la atención brindada a un adolescente

POMONA (AVM).- Un matrimonio tuvo que trasladar de urgencia a su hijo al hospital de Lamarque y luego al de Choele Choel, dado que la atención que le brindaron en el puesto sanitario de esta localidad no los satisfizo en absoluto, según indicaron. Ocurrió luego de que su hijo adolescente ingresara a la salita con una crisis nerviosa, producto de una gran cantidad de pastillas que había ingerido a raíz del estado depresivo que soporta.

El hecho se conoció recién el miércoles pasado pero ocurrió la semana anterior en una casa de familia de esta tranquila localidad cuando el joven de 18 años tomó gran cantidad de pastillas. Su madre, y también su novia, llamaron de urgencia al "101" y hasta allí llegó un móvil policial para trasladarlo de inmediato a la salita de la localidad para que le prestaran atención, dado el cuadro que presentaba.

De acuerdo a lo expresado por la madre del joven, "la doctora responsable del puesto sanitario- lo atendió y le proporcionó únicamente un sedante sin siquiera preguntarme qué pastillas había tomado. Nos dijo que lo lleváramos a casa y lo dejáramos dormir dos o tres horas. Cumplido ese tiempo mi hijo no reaccionaba, así que lo trasladamos en un taxi hasta el hospital de Lamarque".

La mamá del adolescente continuó con el relato en que "allí lo atendieron de maravillas, la doctora Moyano y el resto del personal nos trataron como corresponde pero nos dijeron que debíamos llevarlo hasta Choele Choel porque se podría empeorar el cuadro, aunque sí pudieron sacarlo de la delicada situación".

El papá del joven agregó que "lo internaron y nos hicieron salir afuera para atenderlo, esos minutos se nos hicieron interminables pero al rato salió el médico y nos dijo que nuestro hijo estaba fuera de peligro,aunque teníamos que pensar en ver a un psicólogo para que lo atendiera".

El joven fue dado de alta y evoluciona en su domicilio, pero sus padres ya le sacaron turno para iniciar una rehabilitación con un profesional.

De esta manera, el Puesto Sanitario de Pomona suma un episodio de sumo riesgo, que no llegó a las consecuencias de lo que pasó en el mes de mayo con el niño que convulsionó durante cuarenta minutos en la vereda de la salita hasta su traslado a Lamarque,

A pesar de estos casos, la salud pública sigue teniendo muchas carencias en el Valle Medio.

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