VIEDMA (AV).- Cuando el sol comenzaba alumbrar a Viedma los legisladores se retiraron del recinto al que habían ingresado 12 horas antes. El cielo ya se había despejado, sólo quedaban rastros de la protesta de los estatales con manchas de huevo en la fachada legislativa y desde la 1 de la madrugada 16 diputados se refirieron al presupuesto. Algunos con extensísimos discursos leídos marcando necesidades incumplidas pero finalmente dando el apoyo al proyecto. Pocos fueron escuchados. Los bostezos abundaron y no faltaron los cabezazos.
Cuando el sol salió Río Negro tenía el presupuesto 2009 aprobado por la mayoría de los legisladores.
El diseño elaborado por el Ejecutivo prevé recursos por $ 4.003.999.317 y fue fundamentado por el radical Carlos Sánchez, quien se explayó sobre la metodología utilizada para el cálculo del próximo ejercicio.
El legislador oficialista calificó al presupuesto "de equilibrado, ligeramente superavitario, prudente, cumplible y prolijo".
Por su parte el Justicialismo adelantó a través del diputado Pedro Pesatti el voto negativo.
El legislador dijo que "todavía no se han borrado las signaturas de decisiones que hicieron del empleo público un desmadre en la búsqueda de asegurar electorado; cargos políticos que nunca paran de crecer; compra de voluntades de dirigentes otrora opositores y hoy funcionarios de gobierno; la obra pública signada por el oficioso sistema de reparto entre las empresas amigas; el uso y abuso en el pago de alquileres que paga el estado, admitido por el mismo Ministro de Hacienda; la contratación de droguerías cuyos medicamentos matan; el Ipross que crece en nuevos cargos pero no en prestaciones; Sapse, el Cedepre, la empresa de energía, el Banco, la Caja, el aeropuerto internacional de cargas, Flavors, la veredita que costó noventa mil pesos...".
Criticó que en el mensaje del gobernador al elevar el proyecto de Presupuesto no haya una sola línea de necesaria autrocrítica sobre la situación económica-financiera de la provincia y "la preocupación desborda porque hay evidencias incontrastables de que la administración de los recursos presenta severos problemas". Como ejemplo planteó el caso de los alimentos preelaborados que proveyó la empresa Flavors a modo de graficar la inadecuada administración de los recursos que fueron aplicados para los programas alimentarios.
"Por ello no creemos en esta ley de presupuesto porque no hay un solo indicio que nos permita pensar que los tiempos que vendrán serán distintos", agregó.
Facundo López , de Encuentro-Frente Grande, criticó "la recurrente necesidad del gobierno provincial de tener que valerse de nuevos préstamos y a la asistencia financiera", entre otros aspectos, pero para "no entorpecer al gobierno que requiere para su tarea de esta herramienta legal" dio su voto positivo en general y negativo en particular.
En tanto Fabián Gatti por el Frente Democrático sostuvo que el presupuesto debería ser la herramienta para enfrentar la crisis, aligerar las consecuencias y lograr sostener en el tiempo los avances conseguidos por los distintos sectores productivos de esta provincia" y señaló que "en general, no veo un gran esfuerzo tendiente a acompañar la pujanza privada".