NAIROBI (DPA) - Concentrado, enfundado en un impecable traje azul y con gafas de montura dorada, Theoneste Bagosora escuchó su sentencia.

El Tribunal Internacional de la ONU para Ruanda, con sede en Arusha (Tanzania), condenó al ex coronel de 67 años a cadena perpetua más de 14 años después del genocidio contra la minoría tutsi.

La resolución judicial pone fin a un largo proceso contra el instigador del exterminio con mayores consecuencias desde la Segunda Guerra Mundial.

"La cámara ha condenado a (los ex militares) Bagosora, a Ntabakuze y a Nsengiyumva a cadena perpetua", declaró el presidente del Tribunal apadrinado por la ONU y con sede en Arusha (Tanzania), el noruego Erik Mose. Los tres ex oficiales del ejército ruandés fueron condenados por "genocidio, crímenes contra la Humanidad y crímenes de guerra".

El odio de extremistas hutu como Bagosora, apodado el "coronel Apocalipsis", desembocó en la muerte de más de 800.000 personas, la mayoría tutsis y hutus moderados, que deseaban una Ruanda en paz. Los jueces del tribunal encontraron pruebas contundentes para responsabilizar a Bagosora del asesinato de la primera ministra, Agathe Uwilinguyimana, de diez cascos azules belgas, así como de las matanzas de tutsis en la ciudad de Kigali y en la región de Gisenyi (norte).

A finales de 1991, Bagosora creó una comisión militar que se ocupaba de analizar cómo combatir al enemigo, y éste eran los rebeldes tutsi. En 1993 abandonó airadamente las conversaciones de paz con los rebeldes tutsi y anunció que iba a "preparar el Apocalipsis". Y actuó sin escrúpulos tras el atentado del presidente hutu Juvenal Habyarimana, cuyo avión fue interceptado por un cohete el 6 de abril de 1994 cuando iba a aterrizar en Kigali. Inmediatamente después Bagosora - hombre fuerte del Ministerio de Defensa- aprovechó para liderar el Estado mayor de emergencia. Ese mismo día estalló la matanza y murieron los diez cascos azules, que fue uno de los motivos por los que las fuerzas de la ONU abandonaron el país. El general canadiense Romeo Dallaire, que entonces comandaba a los cascos azules en Ruanda, calificó a Bagosora ante el tribunal de la ONU como "figura clave" del genocidio.

Los juicios continúan. Aunque hasta ahora el tribunal ha condenado a 33 responsables, hay procesos abiertos contra otros 24 y nueve más en preparación.