BUENOS AIRES (Télam).- Dos personas murieron al estrellarse la avioneta en la que viajaban contra dos camiones, en cercanías de una estación de servicio, en la localidad bonaerense de San Fernando, mientras el piloto buscaba un sitio donde realizar un aterrizaje de emergencia, informaron fuentes policiales y de Fuerza Aérea.
El accidente ocurrió pasadas las 6 de ayer a la mañana cuando una avioneta Pipper bimotor patente LVMYX, piloteada por Werner Winkler, de 65 años, y cuyo copiloto era Javier Herrero, mayor de edad, se precipitó a tierra a pocos minutos de despegar del aeródoromo de San Fernando.
Según testimonios de personas que vieron el accidente, la avioneta volaba muy bajo y pasó sobre una estación de servicio, para luego enganchar su tren de aterrizaje con cables aéreos y precipitarse, en forma brusca, contra dos camiones que esperaban descargar mercadería en un supermercado cercano.
Herrero no murió en forma instantánea, sino que golpeó la ventanilla de la aeronave con su mano solicitando ayuda, pero como la avioneta se incendió, fue alcanzado por las llamas antes de que pueda ser auxiliado.
La avioneta había partido del aeródromo de San Fernando y se dirigía a Victoria, Entre Ríos, para buscar pasajeros, cuando se precipitó sobre los dos camiones que transportaban mercadería al supermercado Jaguar.
El avión siniestrado es un "bimotor, con hélice, de seis plazas, que trabaja con aeronafta", informó el jefe de bomberos del aeropuerto de San Fernando, subcomisario Fernando Nievas.
La avioneta pertenecía a la empresa Avia Center, que funciona como escuela de aviación y charter aéreo.
Fuentes de la Fuerza Aérea, dijeron que la avioneta "no realizaba un vuelo de instrucción al momento del accidente sino que se dirigía a Victoria para que allí suban otros pasajeros" y que el siniestro "ocurrió pocos minutos después del despegue del aeródormo".
"En ningún momento la torre de control de San Fernando recibió una solicitud de auxilio o la avioneta se declaró en estado de emergencia", dijo la fuente consultada y agregó: "el encargado de la torre vio como la avioneta llegaba al máximo de altura en el despegue y luego fue volando cada vez más bajo hasta que escuchó la explosión".
Indicó además que "es posible que el piloto haya advertido algún problema grave en la avioneta que no le haya dado tiempo a avisar a la torre y haya buscado en forma desesperada un descampado para aterrizar y, en esta búsqueda, haya enganchado su tren de aterrizaje con los cables".
El portavoz aseguró que el avión "estaba perfectamente habilitado y el piloto había pasado todos los exámenes psicofísicos" y añadió que la máquina "es confiable dentro de lo que son las avionetas, se trataba de un bimotor que puede volar con un solo motor cuando se le planta uno de ellos".
Los cuerpos del piloto y copiloto fueron retirados por personal de la Policía Científica de la Policía Federal, que junto con autoridades judiciales trabajaron en el lugar para determinar las causas del accidente.