NEUQUÉN (AN).- El cadáver de un joven que era buscado por sus familiares fue rescatado de las aguas del río Limay alrededor de las 11 sin que hasta ahora se conozcan las circunstancias en las que se produjo su fallecimiento.
El cuerpo de Daniel Pino, de aproximadamente 30 años, apareció contra la costa el Limay, en la calle Obrero Argentino al final, enredado en las ramas de los sauces. Algunas fuentes indicaron que tenía golpes, pero no se sabe si los recibió en vida.
La madre de Pino había denunciado su desaparición el pasado 13 en la comisaría Segunda. Se cree que el fallecimiento se produjo precisamente ese día, un sábado en el que hubo que soportar altísimas temperaturas en toda la región.
Las precisiones se conocerán hoy cuando el cuerpo médico forense realice la correspondiente autopsia. Al parecer la muerte fue por asfixia por sumersión pero las fuentes consultadas ayer fueron prudentes y no confirmaron si se trataba de un accidente.
Según se supo, personas que paseaban por la costa del río en ese sector dieron aviso a la Policía que en pocos minutos llegó hasta allí para organizar el operativo de rescate del cadáver, que flotaba boca abajo.
Trascendió que el cuerpo estaba vestido con una bermuda roja y medias, y se presume que podría haber perdido el calzado durante los días que permaneció en el agua.
Fue rescatado sin grandes dificultades por el personal de bomberos y de la Policía. También llegaron hasta allí guardavidas del balneario municipal a bordo de una canoa, pero todo había sido ya resuelto por los bomberos.
"Siempre trabajamos en conjunto y hay apoyo mutuo pero esta vez no hizo falta nuestra colaboración", dijo Francisco Baggio, director de Defensa Civil de la municipalidad de Neuquén.
Parte del operativo fue presenciado por la fiscal de Graves Atentados contra las Personas, Sandra González Taboada, quien confirmó que la autopsia se realizará en horas de la mañana.
Todo parece indicar que Pino murió ahogado. De ser así es la segunda víctima que se registra en la actual temporada. El muchacho estaba en un lugar donde no hay servicio de guardavidas.