La multinacional alemana Siemens reconoció, con bastante detalle, el pago de coimas a funcionarios del gobierno de Carlos Menem y de Fernando De la Rúa por la gestión del contrato para la confección de los DNI. Una historia de corrupción que arranca en 1998 y parece terminar en 2007.
La consecuencia más inmediata de este escándalo es que la empresa deberá resignar sus pretensiones en el Ciadi, donde le fueron reconocidos sus reclamos por 217 millones de dólares en febrero del año pasado.
El interés principal de las autoridades norteamericanas, que divulgaron hoy el resultado de una auditoría del estudio Deveboise & Plimpton, se concentra entre 2001 y 2007: es el período durante el cual Siemens cometió irregularidades cotizando en la Bolsa de Nueva York.
Durante ese lapso, la compañía pagó coimas, dice el texto, por más de 31 millones de dólares. Los sobornos de todo el período, es decir, de 1998 a 2007, superan los 100 millones de dólares. No se conoce un caso igual en el país.
