PITTSBURGH (AP).- Apenas semanas después de conseguir ganancias record, los productores de acero enfrentan una nueva realidad: una declinación en las órdenes de compra, recortes en la producción y despidos. Y aún se avecinan tiempos más difíciles, dicen expertos.
La industria siderúrgica atravesaba por un período de auge, alimentado por un aumento en la demanda en China y otros países, apareado con un alza de los precios, que produjeron el mercado más lucrativo para el metal en más de 60 años. Pero la crisis de crédito y la baja económica global han afectado a clientes en mercados claves -construcción, automóviles y equipos industriales-, haciendo desplomarse los precios y forzando a las compañías siderúrgicas a recortar la producción, rebajar los pronósticos de embarques, demorar planes de expansión y deshacerse de trabajadores.
Menores ingresos y más despidos se avizoran en los próximos meses y la producción pudiera no regresar a los niveles vistos previamente en el 2008 por más de dos años, de acuerdo con algunos analistas. "La caída ha sido dramática, tanto por su rapidez como por su magnitud´´, dijo Christopher Plummer, director administrativo de Metal Strategies, una firma consultora en West Chester, Pensilvania.
Arcelor Mittal, el mayor productor mundial de acero, planea reducir su producción en casi un tercio y ha predicho que se avecinan tiempos más difíciles.