BUENOS AIRES (DyN).- El ex juez federal Juan José Galeano insistió ayer en defender su investigación de la causa AMIA, negó haber recibido "instrucciones" del Gobierno de Carlos Menem para frenar la "pista siria" y aseguró que él ahondó en las sospechas sobre el empresario Alberto Kanoore Edul, pero no encontró más pruebas para acusarlo del atentado contra la mutual judía.
Incluso, Galeano aseguró que no conoce a Munir Menem, el hermano del ex presidente que, según las acusaciones, lo habría llamado cuando se preparaba un allanamiento a la casa de Kanoore Edul, a diez días de la masacre que el 18 de julio de 1994 mató a 85 personas en la sede de Pasteur 633.
Además, el ex juez aseguró que el fiscal de la causa, Alberto Nisman, "debería probar primero que Kanoore Edul tiene relación con el atentado", indicaron fuentes del caso. Así, Galeano rechazó los cargos que generaron esta nueva citación a indagatoria, en una causa en donde el ex juez ya fue procesado por "peculado, tormento e incumplimiento de los deberes de funcionario", entre otros cargos, a raíz de su pesquisa en la megacausa AMIA.
Así, el ex juez se convirtió en el primero de los imputados que concurrió a declarar en esta parte del expediente conocido como "AMIA 2", luego de que faltaran a la convocatoria el ex presidente Carlos Menem, su hermano Munir, el ex jefe de la SIDE Hugo Anzorreguy y su ex "número dos" Juan Carlos Anchezar. Galeano defendió nuevamente la investigación que tuvo en sus manos hasta fines de 2003 cuando primero fue apartado por sus superiores y más tarde renunció, pese a que el entonces presidente Néstor Kirchner no aceptó su dimisión y lo hizo enfrentar el juicio político que terminó destituyéndolo.
El juez Lijo investiga si se intentó frenar la pista sobre el sirio Jacinto Kanoore Edul, cuya familia era de la misma zona que la de Menem y, a diez días del atentado, ya aparecía vinculado como un virtual sospechoso de la masacre. Según se indica en la causa, Kanoore Edul habría llamado a la casa del ex reducidor de autos Carlos Telleldín para interesarse por la camioneta que después se usó para cargar los explosivos, mientras vivía cerca del terreno de Constitución 2657 al cual se dirigió la empresa de volquetes Santa Rita luego de dejar el volquete en la sede de la AMIA. El ex subsecretario de la causa AMIA Claudio Lifschitz, principal denunciante de las irregularidades de la pesquisa, aseguró que el 1 de agosto de 1994 Munir Menem llamó al juez para interesarse por la situación de Kanoore Edul, que estaba por ser detenido. Ese día Kanoore Edul había visitado la Casa Rosada, según estableció la Fiscalía.
